C. R. Madrid | viernes, 22 de febrero de 2019 h |

El año 2019 es un punto de inflexión en la historia de la Unión Europea, ya que es año electoral y testigo, además, de la partida de uno de sus Estados miembro. ¿Cómo afectará a un entorno de por si complejo como el del autocuidado, marcado por la fragmentación regulatoria, la demanda de los ciudadanos y la afluencia de nuevas tecnologías? Para intentar averiguarlo, el sector se ha dado cita en Ginebra, Suiza, entre el 4 y 6 de junio, en la 55ª Reunión Anual de la Aesgp.

La perspectiva de crecimiento económico para la región europea es débil y los reguladores siguen siendo muy conservadores ante el sector. Las políticas nacionales fragmentadas desalientan las inversiones y las preguntas se acumulan para los expertos que se darán cita en Ginebra para actualizar las principales tendencias globales: ¿Qué debe suceder para que la región europea sea un destino atractivo para la industria del autocuidado? ¿Cómo atraer inversiones y mantener la importancia del sector en el mapa global de autocuidado? ¿Qué se necesita para que el autocuidado se convierta en una prioridad de la política sanitaria global para los ministros de salud y los responsables políticos? ¿Cómo inspirar políticas de autocuidado sostenidas, integrales y bien coordinadas?

Todas estas preguntas se suman a las que afrontan los reguladores desde hace tiempo. La evidencia del mundo real proporciona una visión significativa de cómo se comporta un medicamento y la capacidad de transformar las fuentes de información disponibles —los registros médicos, las recetas electrónicas o las redes sociales— puede contribuir a mejorar los resultados de salud para las personas al ayudar a la industria y a los reguladores a informar las decisiones reglamentarias y comerciales. Cómo recopilar y analizar los datos disponibles, analizar cómo pueden mejorar la toma de decisiones y dilucidar si los reguladores están listos para ello serán otras de las cuestiones a abordar en este encuentro.

Las marcas, un activo principal para el desarrollo y la promoción del autocuidado, también tendrán un lugar preeminente en el Congreso. El valor de las marcas es reconocido en toda Europa; su utilización también genera un gran interés por parte de los fabricantes a la hora de preservar la confianza de los consumidores. Pero, ¿qué esperan los consumidores de las marcas? ¿Cuál es el verdadero valor de una marca hoy? ¿Cómo contribuyen las marcas a la salud y al bienestar? Y, ¿cómo contribuye la industria de la marca a la competitividad y la innovación? Son otros de los interrogantes que se someterán al juicio de los panelistas.

Ante la incertidumbre que se avecina, quizá uno de los mejores aciertos de los organizadores haya sido la decisión de finalizar el encuentro reuniendo a tres expertos que tratarán de predecir cómo podría evolucionar el mercado en función de posibles futuros alternativos.