Marta Riesgo / Carmen López Madrid | viernes, 12 de julio de 2019 h |

“Las terapias de células T con receptores de antígenos quiméricos (chimeric antigen receptor, CAR) han demostrado ser muy efectivas en el contexto de los tumores líquidos, pero hasta ahora no se han obtenido grandes respuestas en el entorno del tumor sólido”. Con estas palabras, Jesús García Foncillas, jefe del Servicio de Oncología Médica de la Fundación Jiménez Díaz, abordaba la incógnita de la aplicación de estas novedosas terapias más allá de la Oncohematología durante su exposición en la jornada BIO19, organizada por la Fundación ECO.

Según el experto, los resultados en etapas iniciales que se están realizando con terapias CAR-T en el entorno de los tumores sólidos no están arrojando una evidencia tan clara como sí lo han hecho en los tumores líquidos. Y es que estas terapias se encuentran con complicaciones cuando se enfrentan a estos tipos de cáncer. En concreto, estas CAR-T pueden tener dificultades para hacer frente a la heterogeneidad de las células tumorales y la pérdida de antígenos; o pueden sucumbir al microambiente tumoral inmunosupresor y metabólicamente hostil. Por ello, tal como apuntó Jesús García Foncillas, “las respuestas en tumores sólidos son pobres y poco duraderas”.

A su juicio, el siguiente paso para que estas terapias puedan arrojar respuestas en sólidos es modificar la estructura de las mismas para poder acabar con las barreras mencionadas. En este sentido, apuntó a una nueva línea de inmunoterpia, las denominadas terapias de células TCR modificadas (TRuC) que, dijo “abre nuevas pistas en inmunoterapia para tumores sólidos”.

Un estudio preclínico, desarrollado por la compañía TCR2 Therapeutics, que comparaba células CD19-TRuC -T con células CD19-CAR-T, mostró que las células TRuC-T mataban de forma más potente las células tumorales mientras liberaban menos citoquinas in vitro. También activaron una señalización TCR más fuerte que las respectivas células CD19-CAR-T. Además, mostraron una actividad antitumoral estadísticamente significativa mayor.

El candidato de células TRuC-T más avanzado en la actualidad es el TC-210, que se dirige a tumores sólidos positivos a mesotelina. Si bien su expresión en tejidos normales es baja, la mesotelina está altamente expresada en muchos tumores sólidos. La sobreexpresión de mesotelina también se ha correlacionado con un peor pronóstico en ciertos tipos de cáncer y desempeña un papel en la tumorigénesis.

De hecho, la compañía ya ha iniciado un estudio de Fase 1/2 para cáncer de pulmón no microcítico, cáncer de ovario, mesotelioma pleural / peritoneal maligno y colangiocarcinoma. Los resultados se esperan en los próximos meses.