Ainhoa Muyo Madrid | viernes, 22 de junio de 2018 h |

La patronal de la industria farmacéutica británica (ABPI, por sus siglas en inglés) ha celebrado el anuncio realizado por la primera ministra británica, Theresa May, que incluye una mayor financiación para el sistema sanitario británico. En concreto, el Gobierno británico pretende realizar una inversión de hasta 20.000 millones de libras (unos 22.754 millones de euros) en el Servicio Nacional de Salud británico (NHS, por sus siglas en inglés) en el próximo lustro.

Tras el anuncio, la patronal ha asegurado, a través de un comunicado que “el acuerdo plurianual permitirá a todas las partes implicadas poder trabajar juntas y enfocarse en mejorar los servicios, ofrecer mejores resultados en salud y garantizar un mayor acceso a los mejores tratamientos y tecnologías para todos los pacientes”.

Los nuevos fondos destinados a sanidad procederán de partidas que, hasta ahora, tienen que ver con la pertenencia de Reino Unido a la Unión Europea. Esta partida equivale en términos económicos, según el Gobierno británico, a 600 millones de libras cada semana (683 millones de euros). No obstante, otra parte se obtendrá mediante una subida de impuestos que el Gobierno británico aún no ha querido concretar.

Este anuncio responde a la promesa electoral que realizó la propia ministra durante la campaña del referéndum, cuando se comprometió a destinar a servicios sociales y sanitarios el dinero que el país enviaba a la UE.

“Estamos diciendo claramente que el National Health Service es nuestra prioridad, lo que está bien porque el NHS es lo que de verdad le importa a la gente”, ha asegurado May en una entrevista con la cadena BBC. “Hemos estudiado cuidadosamente lo que vamos a invertir para asegurarnos de que otorgamos una asistencia sanitaria de primera categoría”, ha añadido.

El anuncio ha sido duramente criticado incluso dentro de las filas del propio partido conservador. Contrarios al Brexit aseguran que estos planes no se han detallado de una forma correcta y han cuestionado el ahorro real que supondrá abandonar la UE. De hecho, el Instituto de Estudios Fiscales ha destacado que las finanzas públicas tras el Brexit se debilitarán en 15.000 millones de libras (17.070 millones de euros) por año, por lo que financiar este proyecto de ley consumiría cualquier ahorro.

En este sentido, la primera ministra británica ha respondido a sus opositores a través de la red social Facebook, donde ha asegurado que, con la salida de la UE, Reino Unido dejará de pagar los importes anuales que se destinan a Bruselas, por lo que habrá más fondos públicos para invertir en otras prioridades para el país, como es el NHS. Aún así, reconoce que esta partida no será suficiente. “Debemos contribuir como país de manera justa y equilibrada”, ha dicho.

70 aniversario del NHS

El anuncio oficial de esta nueva iniciativa se realizará durante la conmemoración del 70 aniversario del NHS. El Secretario de Salud, Jeremy Hunt, ha afirmado que este proyecto de inversión sitúa al sistema de salud británico como “un sistema sanitario de vanguardia” del siglo XXI. “Este plan de financiación a largo plazo es el regalo perfecto de cumpleaños para el sistema”, ha destacado, puntualizando que “con ello se reconocen los esfuerzos realizados por el personal sanitario en los últimos años para mantener los servicios a los pacientes”.

No obstante, desde la industria británica continúan insistiendo en la necesidad de adoptar un acuerdo cuanto antes en materia farmacéutica de cara a la salida del Reino Unido. “La falta de un acuerdo final hace que las empresas tengan que invertir cientos de millones de libras para duplicar sistemas que serán esenciales en caso de que no se alcanzase un acuerdo”, recuerda la ABPI.