La respuesta global ante el SARS-CoV2 ya se está sucediendo alrededor de todo el mundo. Su propagación ya ha adquirido proporciones pandémicas, afectando a más de 100 países en cuestión de semanas.

Aunque las medidas de contención en china han reducido los casos nuevos en más del 90 por ciento, esta reducción no es similar en otros lugares, como por ejemplo Italia. De hecho, la cuestión sobre la mesa, mirando al país vecino, es poder prever la capacidad de respuesta de manera eficaz del sistema sanitario ante los pacientes infectados y que requieren cuidados intensivos.

El porcentaje de estos pacientes oscila entre el 9 y el 11 por ciento de los pacientes infectados. Así lo expone nn artículo publicado en The Lancet. Los autores revisan las políticas sanitarias llevadas a cabo en el país transalpino. Así, aseguran que si la tendencia al alza de pacientes infectados continúa aumentando, se necesitarán alrededor de 4.000 camas de hospital a mediados de abril. Del mismo modo, las unidades de cuidados intensivos estarán a capacidad máxima.

Dicen los autores, que si el brote italiano sigue una tendencia similar a  la del país asiático, el número de pacientes recién infectados debería comenzar a disminuir en cuestión de días. “Sin embargo, esto no se puede predecir debido a las diferencias entre las medidas de distanciamiento social y la capacidad que ha tenido China de construir instalaciones apropiadas para abordar el coronavirus”.

Según Nature, la propagación de la enfermedad por coronavirus se está volviendo imparable. Ya ha alcanzado los criterios epidemiológicos necesarios para que se declare una pandemia, ya que ha infectado a más de 100.000 personas en 100 países.

Así, aseguran que se necesita desesperadamente una respuesta global coordinada para preparar los sistemas de salud. Los países expuestos a esta enfermedad ya tienen, paradójicamente, lecciones muy valiosas que transmitir. 

Aunque las medidas de contención implementadas en China han reducido los casos nuevos en más del 90 por ciento, esta reducción no es el caso en otros países, incluidos Italia e Irán.

Los datos

Italia ha tenido 12.462 casos confirmados según el Instituto Superior de Sanidad hasta el 11 de marzo, y 827 muertes. Solo China ha registrado más muertes debido a este brote de Covid-19. La edad media de los fallecidos en Italia fue de 81 años. Más de dos tercios de estos pacientes tenían diabetes, enfermedades cardiovasculares o cáncer, o eran ex fumadores. Por lo tanto, “es cierto que estos pacientes tenían afecciones de salud subyacentes, pero también vale la pena señalar que tenían síndrome de dificultad respiratoria aguda (SDRA) causado por la neumonía por el SARS-CoV-2 del síndrome respiratorio agudo severo, y necesitaban asistencia respiratoria”.

Cronología italiana

El 8 de marzo de 2020, el Gobierno italiano implementó medidas extraordinarias para limitar la transmisión viral, incluida la restricción del movimiento en la región de Lombardía. El objetivo no era otro que minimizar la probabilidad de que las personas que no están infectadas entren en contacto con personas infectadas. 

“Esta decisión es ciertamente valiente e importante, pero no es suficiente”, explican los autores. En la actualidad, la capacidad del sistema sanitario para responder de manera efectiva a las necesidades de pacientes infectados es un motivo de preocupación. Sobre todo aquellos que requieren de la unidad de cuidados intensivos. 

Asimismo, la falta de camas que existe en Italia, y la presión sanitaria es una de las mayores preocupaciones del gobierno italiano.

En la región de Lombardía, a pesar de los esfuerzos extraordinarios para restringir el movimiento de personas a expensas de la economía italiana, están lidiando con un miedo aún mayor. “El número de pacientes que acuden a la sala de urgencias puede ser mucho mayor de lo que el sistema puede soportar”. Los profesionales sanitarios, explican los autores de este artículo, han estado trabajando día y noche desde el 20 de febrero. Al hacerlo, alrededor del 20 por ciento (n = 350) de ellos se han infectado y algunos han muerto. 

Lombardía, de hecho, está respondiendo a la falta de camas para pacientes con Covid-19 enviando a los pacientes ingresados en las UCIs, antes de que el coronavirus se desatara, a hospitales fuera de la región.

Predicciones

Con este dibujo de la situación, los autores presentan una serie de predicciones que podrían ayudar a la clase política y las autoridades sanitarias a configurar el mapa futuro de situación.

“El número oficial de personas infectadas durante el brote del virus Covid-19 en Italia es indicativo de la propagación de la infección y de los desafíos que se presentarán a los hospitales italianos y, en particular, a las UCIs”. 

Una de las preguntas es si el número de pacientes infectados seguirá aumentando de manera exponencial. ¿Durante cuánto tiempo?

Si el cambio en la pendiente de la curva no ocurre pronto, los problemas clínicos y sociales tomarán dimensiones inmanejables. Para hacer esta predicción. “La única forma es comparar las tendencias en los datos recopilados en la región de Hubei con la de la población italiana”.

“Es posible derivar la curva acumulativa de los pacientes infectados desde el inicio de la serie de datos. Estos datos muestran que la fase inicial del brote siguió la tendencia exponencial esperada”. A partir del 7 de enero, el número acumulado de pacientes infectados comenzó a divergir de la tendencia exponencial 20 días después. “Si el brote italiano sigue una tendencia similar a la de China, podemos sugerir que el número de pacientes recién infectados podría comenzar a disminuir dentro de 3 a 4 días a partir del 11 de marzo”.

De manera similar, aseguran, se puede prever que la curva acumulativa de pacientes infectados alcanzará su punto máximo 30 días después, “con la carga máxima prevista por los centros hospitalarios para el tratamiento de estos pacientes prevista para ese período”.

Los autores explican que existe una heterogeneidad en la dinámica de transmisión entre China y otras partes del mundo, donde el número de personas infectadas sigue siendo menor. “Podría no ser realista suponer que lo que sucederá en Italia pronto podría reflejar lo que ocurrió en Hubei”.

Características del Sistema Nacional Italiano

Desde 1978, Italia ha tenido el privilegio de tener un sistema nacional de salud (Servizio Sanitario Nazionale), que se reformó entre 1992 y 1993. Sus principios y organización derivan del modelo del Servicio Nacional de Salud Británico, y se basa en tres principios fundamentales. El primer principio es la universalidad. Todos los ciudadanos tienen el mismo derecho a acceder a los servicios prestados por el sistema nacional de salud. El segundo es la solidaridad. Cada ciudadano contribuye a financiar el servicio nacional de salud en función de sus medios, a través de impuestos progresivos. El tercero es la uniformidad. La calidad de los servicios prestados por el servicio nacional de salud a todos los ciudadanos en todas las regiones debe ser uniforme. Así, todas las personas deben pagarlo como contribuyentes, y cada persona da un poco para recibir mucho a cambio, si no se encuentra bien.

Con todo, la capacidad del sistema para responder a las circunstancias cambiantes ha estado bajo una enorme presión, al menos en la región de Lombardía, donde ya han surgido dos grupos desde el 21 de febrero.

“Predecimos que si la tendencia exponencial continúa durante los próximos días, más de 2500 camas de hospital para pacientes en unidades de cuidados intensivos se necesitará en solo 1 semana para tratar el SDRA causado por la neumonía por SARS-CoV-2 en Italia”. 

Mientras tanto, el gobierno se está preparando para aprobar una legislación que permitirá al servicio de salud contratar a 20 000 médicos y enfermeras más y proporcionar 5000 ventiladores más a los hospitales italianos. “Estas medidas son un paso en la dirección correcta, pero nuestro modelo nos dice que deben implementarse con urgencia, en cuestión de días”.