Marta Riesgo Madrid | miércoles, 24 de agosto de 2016 h |

Tras meses de pujas entre compañías por adquirir Medivation, empresa especializada en inmuno oncología, finalmente ha sido la norteamericana Pfizer la que ha conseguido hacerse con la empresa y, con ella, con el prometedor tratamiento contra el cáncer de próstata Xtandi. En total, la operación de compra alcanza los 14.000 millones de dólares en efectivo (12.396 millones de euros), lo que supone el pago por parte de Pfizer de 81,50 dólares (72 euros) por cada acción de Medivation. Xtandi genera actualmente ventas anuales próximas a los 2.200 millones de dólares (1.950 millones de euros) y se estima que la cifra de negocio se puede doblar en los próximos años.

Estos datos son precisamente los que han despertado el interés del sector por esta compañía biotecnológica. De hecho, la francesa Sanofi hizo ya una oferta en abril, y también se interesaron públicamente por Medivation Merck, Celgene y Gilead Sciences. Además, Medivation ha trabajado con la compañía japonesa Astellas Pharma para desarrollar otros tratamientos con Xtandi; incluyendo el cáncer de mama y el carcinona hepatocelular responsable de la mayoría de los cánceres de hígado.

Con la compra de la biotecnológica, Pfizer también incorporará a su pipeline la prometedora molécula Talazoparib, un inhibidor de PARP que la propia Medivation calificó como el mejor de su clase y que podría superar en ventas incluso a Xtandi.

El presidente de Pfizer, Ian Read, aseguró tras el anuncio de compra que esta operación “se espera que acelere el crecimiento de ingresos e impulse el crecimiento potencial de nuestra compañía”. Por su parte, el fundador y presidente de Medivation, David Hugh, aseguró que Pfizer “es el socio ideal para extender el alcance de nuestra exitosa licencia de Xtandi y para llevar a nuevas etapas de desarrollo a nuestros prometedores activos”.


El presidente de Pfizer asegura que esta compra acelerará el crecimiento de los ingresos


Los consejos de administración de ambas compañías han aprobado de forma unánime la operación. De este modo, Pfizer refuerza su presencia en el mercado oncológico, al que recientemente se ha incorporado Ibrance, un fármaco contra el cáncer de mama que contribuyó a que los ingresos de su división de Medicina Innovadora de los laboratorios se incrementasen un 9 por ciento en el segundo trimestre con unas ventas de 514 millones de dólares (455 millones de euros).

Previsiones de mercado

Se estima que el mercado de la inmuno oncología podría alcanzar los 34.000 millones de dólares en 2024, según el último informe publicado por la consultora Globaldata que toma como referencia los siete principales mercados (Estados Unidos, Francia, Alemania, Italia, España y Japón). Estos datos demuestran el interés de las grandes farmacéuticas por adquirir compañías como Medivation que tengan prometedores fármacos en este área.


El mercado de inmuno oncología podría alcanzar los 34.000 millones de dólares en 2024


De hecho, la consultora BMO Capital Markets realizó una lista con las compañías que pueden ser potencialmente atractivas para las grandes farmacéuticas, entre las que se encuentran BioMarin Pharmaceutical y Intercept Pharmaceuticals. “Dada la escasez de compañías tecnológicas de mediana capitalización, creemos que las compañías que quedan despertarán creciente interés en tanto las grandes compañías farmacéuticas sigue viendo a la biotecnología como una fuente de crecimiento”, asegura.

Pfizer, decidida a comprar

Precisamente el presidente de Pfizer aseguraba tras el anuncio de compra de Medivation que su compañía continúa decidida a “reorganizar nuestro portfolio y fortalecer así nuestra posición en oncología e innovaciones”, dejando la puerta abierta a futuras compras.

Pfizer lidera las grandes adquisiciones realizadas en el sector en las últimas décadas. Pero no todas han acabado en buen puerto. En 2015, comunicaba la adquisición de Allergan, conformando así el mayor gigante farmacéutico a nivel global. Sin embargo, el pasado abril ambas compañías anunciaban el fracaso de esta operación. La razón principal reside en el endurecimiento de la normativa que regula el cambio de sede fiscal en Estados Unidos. En concreto, esta reforma legislativa penaliza fuertemente a las compañías estadounidenses que pretenden alejar su sede fiscal de EE.UU, intención que mostró Pfizer.

En 2014 Pfizer también buscó hacerse con AstraZeneca. Llegó a realizar una oferta de hasta 116.000 millones de dólares, pero ni siquiera esta cuantiosa cantidad logró convencer a la británica.

La táctica de grandes adquisiciones comenzó en 1999 con la adquisición de Warner-Lambert por 87.300 millones de dólares. Tres años después anunciaba la compra de Pharmacia por 64.300 millones de dólares. En 2009 volvería a sorprender al mercado con el anuncio de adquisición de Wyeth por 64.200 millones de dólares.

Compra el negocio de antibióticos de AstraZeneca

Horas después de anunciar la adquisición de Medivation, la farmacéutica norteamericana anunciaba la compra del negocio de antibióticos de AstraZeneca por 725 millones de dólares (640 millones de euros). Según el acuerdo, Pfizer pagará 550 millones de dólares a AstraZeneca cuando se cierre la transacción y hará otro pago de los 175 millones restantes en enero de 2019. Posteriormente, tal y como establecen los parámetros del pacto entre compañías, según el progreso y el éxito que tengan los fármacos, la estadounidense abonará a AstraZeneca otros 850 millones de dólares (753 millones de euros). El acuerdo afecta a tres antibióticos ya aprobados y a dos medicamentos que aún se encuentran en fase clínica. Por otro lado, la compañía norteamericana también tendrá derecho a vender dichos fármacos en la mayoría de mercados fuera de EEUU. La operación no incluye la cartera de medicamentos biológicos antiinfecciosos de la multinacional, ni los negocios que escindió el año pasado para centrarse en el desarrollo de antiinfecciosos innovadores.