El Global Madrid | miércoles, 03 de julio de 2019 h |

Bristol-Myers Squibb se ha comprometido a realizar desinversiones con el objetivo de que la Comisión Federal de Comercio (FTC, por sus siglas en inglés), el regulador de competencia estadounidense, dé su visto bueno a la compra de Celgene por 74.000 millones de dólares (64.938 millones de euros).

En concreto, Bristol-Myers planea poner en venta el medicamento Otezla, destinado a tratar la psoriasis y la artritis psoriásica. Bristol-Myers Squibb se compromete a vender activos para finalizar la adquisición de Celgene. El fármaco, propiedad de Celgene, generó un total de 1.608 millones de dólares (1.411 millones de euros) en ventas el ejercicio de 2018, equivalente al 10,5 por ciento de la facturación total de la firma en dicho ejercicio.

“Bristol-Myers Squibb está comprometido a trabajar con las autoridades regulatorias de todo el mundo para completar la operación propuesta con Celgene”, aseguraba la compañía en un comunicado. “Estamos enfocados en cumplir la promesa de la transacción y continuamos trabajando para completar la transacción de manera oportuna “, puntualizaron.

La investigación en curso realizada por la FTC para discernir si la unión de los dos laboratorios afectaría a la competencia o a los usuarios ha obligado a retrasar la culminación de la operación. Las empresas estiman ahora que el trato se cerrará a finales de 2019 o principios de 2020, frente al tercer trimestre de este año que pronosticaban.