El plan de recuperación económica posterior a la crisis de la Covid-19 es uno de los temas protagonistas en las instituciones europeas en estos días. En este contexto los laboratorios farmacéuticos implantados en Europa han ofrecido su colaboración a los Gobiernos de la Unión Europea para colaborar en el mismo. Así lo ha anunciado la Federación Europea de Asociaciones de la Industria Farmacéutica (Efpia) de cara a la reunión virtual que va a celebrar con los ministros de Sanidad de la UE.

En este encuentro, los responsables sanitarios van a abordar el papel de la Estrategia Farmacéutica, la Estrategia Industrial y el Plan de Recuperación Económica. A este respecto, la directora general de la Efpia, Nathalie Moll, asegura que “es crucial que todos los actores trabajen juntos para forjar una Estrategia Farmacéutica vinculada tanto a la estrategia industrial como al plan de recuperación“. De esta manera, espera que “pueda impulsar la eocnomía europea y simultáneamente, desarrollar su resistencia a esta y a futuras amenazas para la salud”.

Moll añade que desde la Efpia apoyan “firmemente un diálogo regular don los Estados miembros para aprender las lecciones de la Covid-19, aprovechando alianzas y nuevas formas de trabajar surgidas durante la crisis”. En este sentido considera que “este enfoque de colaboración puede ayudar a Europa a fortalecer nuestro ecosistema de investigación, aumentar nuestra capacidad de recuperación, ofrecer mejores resultados de salud para los ciudadanos e impulsar nuestra recuperación económica”.

Aportación al crecimiento de la UE

Uno de los valores que pretende asumir la industria europea es contribuir a la autonomía estratégica de la región y su camino hacia la recuperación. Para lograrlo, están trabajando en varios frentes. En primer lugar, desarrollando y fabricando tratamientos y vacunas asequibles que ayuden a salir de la crisis del coronavirus. También, a proporcionar instrumentos para aumentar la resistencia de Europa frente a futuros brotes. Esta capacidad de recuperación comienza en el ecosistema de investigación sanitaria y debe abarcar desde el suministro y fabricación hasta el acceso en la UE.

También cabe destacar que desde el inicio de la pandemia las compañías farmacéuticas implantadas en Europa han asegurado el suministro de medicamentos. Esta se ha establecido como una de las prioridades para los laboratorios durante la crisis, y de momento, seguirá siéndolo. Para lograrlo, las compañías han utilizado su experiencia para aumentar el suministro y asegurarse así de satisfacer las necesidades de los pacientes en toda Europa.

Influencia en la economía y el empleo

Otro de los puntos a tener en cuenta es el papel que juega la industria farmacéutica dentro de la UE como motor económico. Cada año, invierte unos 36.500 millones de euros en I+D en este continente, dando empleo a 765.000 personas. Además, según un informe publicado por PwC en junio de 2019, este sector aglutina un total de 2,7 millones de puestos de trabajo de la UE.

Este mismo documento refleja que las actividades de las empresas farmacéuticas supusieron una contribución de más de 100.000 millones de euros directamente a la economía de la Unión. Asimismo, aportaron otros 106.000 millones a través de la cadena de suministro y el gasto de los empleados. En este contexto, la industria farmacéutica innovadora en Europa también es el mayor contribuyente a la balanza comercial positiva de Europa, con una aportación de más de 91.000 millones de euros.