L. Díaz Madrid | viernes, 02 de noviembre de 2018 h |

El sector farmacéutico cerró la semana con cierto predominio de los movimientos alcistas: de los valores integrantes del Índice Global, 15 cerraron en positivo y 10 lo hicieron con pérdidas. Los movimientos más significativos fueron, la subida de Grifols del 12,9 por ciento, mientras que Pharmamar lideró una vez más las pérdidas, retrocediendo un 8,4 por ciento.El Índice Global se anotó una ganancia del 1,5 por ciento, en línea con el comportamiento del mercado. En el acumulado del año se sitúa ligeramente en positivo con un avance del 1 por ciento, mientras que en la comparación interanual, la ganancia es superior, del 2 por ciento.

Grifols se disparó en estas últimas sesiones por la reacción del mercado ante los resultados publicados de un ensayo clínico (AMBAR) para el tratamiento del Alzhéimer. Estos resultados mostraron una ralentización significativa del avance de esta enfermedad en un porcentaje elevado de pacientes sometidos a este ensayo. La compañía ha manifestado su intención de realizar un estudio más detallado, que comenzará en el primer semestre del próximo año.Pharmamar representó una vez más la otra cara de la moneda, profundizando en su evolución negativa que lo ha llevado a marcar un nuevo mínimo, si bien en las dos últimas sesiones ha comenzado a recuperar posiciones. Este valor viene dibujando un año bajista que inició a raíz de la decisión negativa de la Agencia Europea del Medicamento sobre el fármaco Aplidin.

En lo que va de ejercicio Pharmamar ha retrocedido más de un 50 por ciento, gran parte de esta caída se concentra en este mes de octubre con una pérdida superior al 20 por ciento. La opinión del mercado sigue focalizada en este serio contratiempo sin llegar a valorar los avances que viene realizando esta compañía en otras líneas de investigación, como en los ensayos Helix 1, actualmente en fase III, relativo al tratamiento de la enfermedad del ojo seco.

Bayer cerró la semana con un descenso del 2,3 por ciento que lo lleva a cotizar en 66,7 euros, situándose muy cerca de su mínimo anual. Su perfil en el último año ha sido netamente bajista, comenzando el ejercicio en máximos por encima de los 110 euros, acumulando un descenso en los 12 últimos años cercano al 40 por ciento, situándose entre los valores de la muestra con peor comportamiento en este periodo. La caída de Bayer se ha acentuado en los últimos meses sin que los diferentes soportes que ha ido encontrando hayan podio frenar este descenso. En todo caso, la fuerte pérdida acumulada limita el recorrido bajista de este valor, que en principio debería tender a estabilizarse en los niveles actuales antes de acometer una fase de recuperación.

Sanofi también cerró en negativo perdiendo un 0,7 por ciento, cotizando en 75,6 euros, moviéndose en la franja superior de su rango de variación del último año. Desde febrero Sanofi viene ganando posiciones, superando la senda bajista con la que cerró el pasado año y con la que inició este. Desde febrero se ha revalorizado casi un 20 por ciento, comportamiento notablemente mejor que el de la media del sector. A corto plazo su perfil es alcista, contando además con un amplio campo de recuperación (Sanofi sigue cotizando lejos del máximo que marcó el pasado año cuando llegó a superar ampliamente los 90 euros).

AstraZeneca prácticamente repitió su precio de la semana anterior retrocediendo tan sólo un 0,2 por ciento. Desde marzo este valor viene ganando posiciones, dibujando un perfil en 2018 claramente alcista, si bien tras marcar un máximo en la primera quincena de agosto inició un desplazamiento horizontal no exento de cierto nivel de volatilidad.