Las vacunas son herramientas muy poderosas para prevenir enfermedades, pero tienen además un gran valor social y económico, gracias al impacto en el bienestar social y en su contribución a la sostenibilidad de los sistemas sanitarios. Por cada euro que se invierte en vacunas, se revierten 19 a la sociedad y la economía, según un estudio de la Office of Health Economics de Londres publicado hace apenas unas semandas. Para analizar el decisivo papel de las vacunas, la mejora de las coberturas en España, el impacto de los determinantes sociales en el acceso a la vacunación o los avances en investigación en este ámbito se ha celebrado la sesión ‘Vacunación a lo largo de la vida: un compromiso de equidad’, organizada por Farmaindustria y la Asociación Española de Vacunología (AEV).
Durante la jornada se ha enfatizado en la necesidad de que la industria farmacéutica respalde sus avances en vacunación con estudios sólidos que demuestren su efectividad y seguridad, un aspecto crucial para mejorar las coberturas en vacunación. Emili Esteve, director del Departamento Técnico de Farmaindustria, ha recordado que el “campo de las vacunas ha sido un pilar dentro de nuestra organización durante muchos años”. “Desde hace tiempo se reconoce el enorme potencial de las vacunas para transformar los sistemas de salud, además de contribuir a la sostenibilidad del Sistema Nacional de Salud (SNS)”, ha añadido. Por esta razón, ha incidido que Farmaindustria considera a las vacunas como uno de los elementos clave dentro de los medicamentos innovadores.
María Fernández Prado, secretaria de la AEV, ha destacado que una de las principales fortalezas de la AEV es su enfoque multidisciplinar, subrayando el mensaje de la vacunación como un compromiso con la equidad y el estudio de los determinantes sociales. “Nuestra asociación cobra relevancia al transmitir la importancia de la vacunología y proporcionar un espacio para la reflexión”, ha sostenido. “Hace dos años, se creó un grupo de trabajo sobre vacunología social que está profundizando en estos temas. Si bien las vacunas tienen un coste, su valor es incomparablemente mayor”, ha señalado.
La industria farmacéutica juega un papel clave en facilitar la investigación, pero es necesario analizar si los resultados obtenidos permiten recomendar su implementación en el sistema sanitario. “Todos los eslabones que forman parte del desarrollo de una vacunas desde su pensamiento hasta su comercialización son necesarios y deben estar bien comunicados”, ha explicado Marta Soler Soneira, epidemióloga especialista en vigilancia de enfermedades prevenibles mediante vacunación en el Centro Nacional de Epidemiología del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII). “En cada uno de estos pasos, la comunicación efectiva entre todas las partes es esencial”, ha recordado.
La investigación y desarrollo (I+D) en vacunas es un proceso largo y complicado, ha recordado Carlos Martín Montañés, director del Grupo de Genética de Microbacterias en la Facultad de Medicina de la Universidad de Zaragoza. Durante su intervención ha mencionado que la tuberculosis, una de las enfermedades infecciosas más mortales de la historia, tiene vacunas disponibles que generan anticuerpos, “pero para el VIH y la malaria aún no hay avances significativos”, ha insistido. “En el caso de la tuberculosis, la única vacuna efectiva fue desarrollada hace más de 100 años, por lo que es necesario investigar la inmunidad celular en países endémicos para evaluar la eficacia de nuevas vacunas”, ha reiterado.
Carmen Durán, directora general de Salud Pública en la Consellería de Sanidade de la Xunta de Galicia, ha incidido en la necesidad de un cambio cultural dentro de las organizaciones sanitarias para aumentar las coberturas. “Primero, debemos centrarnos en la administración y luego en los profesionales sanitarios. “El presupuesto en medicamentos ha ido en aumento, incorporando novedades terapéuticas, pero nos cuesta demasiado introducir nuevas vacunas”, ha reiterado. La experta ha mencionado que “la salud pública recibe menos del 1 por ciento del presupuesto, y es necesario un enfoque holístico que reconozca la vacunación como un pilar esencial”. Por último, ha recordado que “la formación, tanto en pregrado como en formación continuada, es crucial para facilitar el trabajo de los profesionales, quienes a menudo no tienen tiempo suficiente en sus consultas para explicar la importancia de la vacunación”.
Antonio Blanes, director de servicios farmacéuticos del Consejo General de Colegios Farmacéuticos (CGCOF) ha destacado el papel de la farmacia comunitaria en las estrategias de prevención. “La pandemia demostró el valor del farmacéutico comunitario, quien ha colaborado con las autoridades sanitarias de forma activa”, ha recordado. “Países como los Países Bajos y España son los únicos en Europa que no emplean farmacéuticos comunitarios para la administración de vacunas, a pesar de que los resultados internacionales han sido positivos”, ha reiterado.
Determinantes sociales en salud
Otro de los asuntos tratados ha sido el rol de los determinantes sociales en las coberturas de vacunación. En este sentido, Mario Fontán, asesor de la Secretaría de Estado de Sanidad, ha hecho hincapié en la necesidad de mejorar la formación sobre determinantes sociales en salud y la gestión de datos para obtener una visión más precisa de las coberturas vacunales. “El tema de los determinantes sociales no recibe suficiente atención en la formación médica, donde a menudo se simplifica el vínculo entre enfermedad, vacunación y estos determinantes, asumiendo que la falta de educación e información es la causa principal del problema”, ha admitido. “Aunque la población española generalmente confía en las vacunas, se necesitan datos más precisos para analizar las coberturas vacunales, ya que los existentes son demasiado generales”, ha profundizado.
A continuación, ha repasado las acciones que están llevando a cabo desde el Ministerio de Sanidad en este ámbito. “Estamos en un momento crucial para la recopilación de datos, utilizando indicadores relacionados con la renta para identificar áreas problemáticas”, ha precisado Fontán. En la actualidad, ha recordado que “estamos en un proceso de negociación del Espacio Europeo de Datos Sanitarios (EEDS), con una inversión significativa destinada a mejorar la infraestructura nacional de datos”. Además, ha adelantado que “se está desarrollando una nueva red de vigilancia que destaca la importancia de un sistema de información eficaz”.
El catedrático de Medicina Preventiva en la Universidad Rey Juan Carlos, Ángel Gil, ha señalado que “el sistema sanitario español, con intervenciones como el seguimiento de las mujeres embarazadas, ha conseguido avances significativos en la reducción de la mortalidad materna, pero aún existen disparidades en otros sectores, como la vacunación de adultos mayores”, ha matizado. Por su parte, Mara Garcés, pediatra en el Centro de Salud Nazaret, ha insistido en que la importancia de la vacunación en pediatría les ha llevado a reconocer la necesidad de mantener altas coberturas vacunales, un objetivo que requiere el compromiso de los profesionales de la salud. “En la Comunidad Valenciana hay áreas con un perfil antivacunas y coberturas muy bajas, donde persisten miedos y resistencias, sin que el rechazo a la vacunación sea exclusivo de personas con bajo nivel cultural”, ha evidenciado. “Con los recursos disponibles y bases de datos robustas se puede mejorar la situación”, ha añadido.
Arantxa Sancho, directora del departamento de Asuntos Médico-Científicos de Farmaindustria, ha insistido en la importancia de foros que permitan el debate entre los distintos agentes implicados, mientras que Bárbara Astilleros, directora asociada de Relaciones Institucionales de MSD ha subrayado que “las vacunas no solo salvan vidas, sino que también tienen un impacto significativo en el sistema sanitario”, ha matizado. “Nuestro calendario vacunal, que celebrará su 50 aniversario el próximo año, debe adaptarse a las nuevas realidades, especialmente en el ámbito de la vacunación adulta”, ha reafirmado.
“Confío en que esta jornada construya un ámbito de diálogo en temas de vacunación, con todos los agentes implicados: compañías farmacéuticas, profesionales sanitarios, expertos en inmunización, farmacéuticos, Administración…”, ha señalado Ana Hernando, Government Affairs Director del área de Vacunas de GSK. Finalmente, Eva Ortega-Paíno, secretaria general de Investigación del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, ha sido la encargada de clausurar la sesión, destacando el compromiso con la promoción de la salud y la educación, así como el esfuerzo del gobierno en incrementar la inversión en I+D, fundamental para mantener el progreso científico y mejorar las infraestructuras. “La vacunación sigue siendo una de las estrategias preventivas más eficaces, pero enfrentamos desafíos como la desinformación, que deben ser abordados mediante una educación continua en inmunización”, ha concluido.