M. R. Madrid | viernes, 31 de mayo de 2019 h |

El análisis realizado por la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) sobre el gasto público de recetas dispensadas en oficina de farmacia no ha tenido en cuenta la singularidad de los medicamentos biosimilares. Al menos eso es lo que se aprecia desde la Asociación Española de Biosimilares (BioSim), que espera que este organismo entienda las especificidades de estos medicamentos que, en ningún caso, aseguran, pueden compararse con los genéricos. Y es que, a lo largo de las más de 300 páginas del Spending Review de la AIReF, casi la totalidad de las veces que se menciona a los biosimilares se hace justo después de hacerlo sobre los genéricos, sin ningún tipo de mención a las particularidades de estos medicamentos.

“Se trata de un informe muy riguroso y francamente bien hecho desde el punto de vista técnico; pero a la hora de abordar los contenidos observamos que se asocia demasiado a genéricos con biosimilares”, explica a EG la directora general de la patronal, Regina Múzquiz, que puntualiza que en ningún momento se le ha dado voz a su organización como parte implicada. Y es que, desde su punto de vista, es de vital importancia que AIReF entienda “las diferencias” entre estos dos tipos de medicamentos. Aunque reconoce que actualmente el impacto de los biosimilares en la oficina de farmacia no es muy amplio, recuerda que de cara a 2022 será aún más grande.

En cuanto a las medidas propuestas en el informe, la directora general de BioSim muestra su preocupación ante el hecho de que se conciba a la industria farmacéutica como un mero proveedor. “Si solo nos centramos en los ahorros producidos con el SPR o unas posibles subastas perderemos la visión estratégica de una industria farmacéutica que realiza una enorme aportación a la salud de la población, al tejido industrial y al empleo de alta cualificación”.

Por último, Múzquiz recuerda que el propio informe reconoce que el crecimiento del gasto farmacéutico de receta está bajo control. Por ello, considera poco necesario “acometer importantes reformas ante una situación equiparable a la de otros países de nuestro entorno”.