c. r. Madrid | viernes, 04 de mayo de 2012 h |

El Servicio Andaluz de Salud (SAS), a través de su subdirector de Farmacia, Antonio Peinado, aportó su opinión a la consulta electrónica de la UE sobre el reconocimiento mutuo de recetas.

Pregunta. ¿Cuáles es el mayor problema de la dispensación de prescripciones transfronterizas?

Respuesta. Por un lado la identificación del paciente. Por otro, problemas legales (prescripción enfermera, distintas reglas en materia de sustitución, fármacos que en algunos países son de dispensación hospitalaria…). Por último, problemas semánticos, la necesidad de compartir datos y el consentimiento del paciente.

P. ¿Qué mejora la identificación de un fármaco?

R. La información sobre el envase del medicamento; el número de envases disponibles para ser dispensados en cada momento; la vía de administración y el número de unidades requeridas: un inhalador, un comprimido, una dosis, un miligramo…

P. ¿Para identificar a un paciente?

R. Pasaporte, DNI o número de la Seguridad Social.

P. ¿Y para ayudar al paciente a entender lo que se le ha prescrito?

R. El historial médico (para doctores y pacientes), además del listado actual de medicamentos que el paciente está tomando, ya sea en papel o receta electrónica.

P. ¿Qué más puede mejorar la verificación del prescriptor?

R. La confianza entre países. Cada profesional sanitario será unívocamente identificado y verificado en su sistema local a través del Punto de Contacto Nacional.

P. Otras aportaciones del SAS…

R. En materia de sustitución genérica, la respuesta debe ser siempre un ‘sí’. El médico puede recomendar un ‘no’ solo en ciertos casos, pero siempre debe justificar su decisión.