Más de cien horas de análisis y debate a lo largo de las tres jornadas de la 28ª edición del Congreso Europeo de Oficina de Farmacia y Salón de Medicamentos y Parafarmacia (Infarma Madrid 2016) dan para mucho. He aquí un breve repaso de lo que ‘sucedió en Madrid’ del 8 al 10 de marzo en los cinco itinerarios en los que la se dividió el programa científico del evento.
Ordenación farmacéutica: debate “cerrado”, pese a Competencia
Juan Manuel Rodríguez Cárcamo, abogado del despacho Pérez Lorca y otrora abogado del Estado ante el Tribunal Superior de Justicia de Luxemburgo en litigios como el dictamen motivado abierto por la CE contra Italia por su modelo farmacéutico regulado (similar al español) recordó que diversas sentencias de este tribunal (2009 y 2010) no dejan lugar a dudas sobre la potestad que tienen los Estados Miembro de establecer restricciones en sus modelos farmacéuticos hizo que la Comisión Europea abandonase sus intenciones liberalizadoras. Por ello, calificó de “sorprendente” que recientemente fuese la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia quien retomase esta cuestión con la publicación de un informe sobre el sector de boticas. Más sopresa causa que dicho informe no haga mención alguna a estas sentencias. “No es posible abordar el debate de la regulación sin aludir a ellas”, recordó Rodríguez Cárcamo.
La colaboración público-privada no debe centrarse ‘solo’ en el ahorro
En la mesa redonda ‘La colaboración público-privada en el sistema sanitario’ se puso énfasis en la “insostenibilidad” del Sistema Nacional de Salud sin el establecimiento de sinergias entre entes públicos y compañías privadas. Sus participantes —César Pascual, director de Coordinación de Asistencia Sanitaria de Madrid, y Carlos González Bosch, presidente de la Comisión de Sanidad de la CEOE, defendieron que estas colaboraciones tengan no solo una visión a corto plazo y que las mismas no busquen el único fin del ahorro sino que generen valor.
La botica defiende su propio sistema de avisos de desabastecimientos
“La realidad que pueden vivir las farmacias respecto al desabastecimiento de medicamentos difiere en ocasiones de la información oficial transmitida por la Agencia Española del Medicamento”. Por ese objetivo de “recojer la realidad”, la directora técnica del Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos, Carmen Recio, ‘defendió’ que las farmacias españolas dispongan de su propio sistema de información sobre faltas y desabastecimientos: Cismed, puesto en marcha por esta organización colegial. Recio puso como ejemplo Bexsero, fármaco que Cismed ya identificó en situación de desbastecimiento en octubre de 2015, mientras que la consideración oficial de medicamento “en falta” por la Aemps llegó ya en noviembre. Actualmente, 4.000 farmacias están adheridas y proporcionan información a Cismed, detéctandose en torno a 20 y 30 situaciones de desabatecimientos a la semana. Semanalmente, el CGCOf envía informes a COF, Ministerio y Sanidad.
La formación continuada, “derecho y deber” del farmacéutico
Los conocimientos científicos, si no se someten a un proceso de actualización, tienen fecha de caducidad. Por ello, la formación continuada debe ser entendida como un “derecho y deber” del profesional farmacéutico, y, asimismo, una “obligación” para todas las entidades —universidades, colegios, sociedades, industria y distribución— ofrecer una formación continuada de calidad. Unos conocimientos que tendrían fecha de caducidad: 15 años. “Si en ese tiempo no nos actualizamos, estamos perdidos”, opinó en una mesa redonda Emilia Sánchez Chamorro, directora general de Planficación, Investigación y Formación de Madrid. Por su parte, Pilar Varela, vocal de Formación del COF de Madrid, habló de esta actualización de conocimientos como “una necesidad perentoria” para su desarrollo.
Cataluña: referente en el éxito del cribaje a través de boticas
Cuando, en 2000, el Instituto Catalán de Oncología puso en marcha un programa de detección precoz de cáncer de colon y recto a través de sus centros de salud de Atención Primaria, solo se consiguió la participación del 17 por ciento de la población diana (mientras que se considera una “participación aceptable” si se supera el 45 por ciento). Lo que no se conseguía desde AP sí se ha conseguido en la botica desde que en 2010 se implantó en Barcelona un programa de detección de esta patología mediante la realización y recogida de pruebas en estos establecimientos —y que desde 2015 se ha extendido también a las boticas de Girona—. Ya en su primera fase (2010-2011) se alcanzó al 43 por ciento de la población diana. Las cifras subieron al 48 por ciento en su segunda fase (2012-2013) y en la fase actual —sin cerrar— se están alcanzado picos de 60 por ciento. Mientras, en Lérida y Tarragona este programa se sigue delegando en AP. “Veremos quién obtiene mejor resultados”, indicó en una mesa Mercé Barau, vocal de AF del COF de Barcelona.