Igual que el Ebro discurre por Zaragoza, despacio pero caudaloso, la farmacia comunitaria muestra cada vez más recodos donde tiene un papel que cumplir. Esta ciudad se convirtió esta semana en el centro neurálgico de la defensa del papel que la farmacia ejerce en el sistema sanitario. El VII Congreso Nacional de Farmacéuticos Comunitarios, arrancó su andadura el pasado 26 de mayo. Gota a gota, ha desgranado temas fundamentales para los profesionales de la farmacia, aunque también aquellos que algunos desearían que se quedaran en la ‘rebotica’.
Para arrancar el evento, el presidente de Sefac, Jesús Gómez, planteó la posibilidad de que los farmacéuticos complementen prescripciones para mejorar la adherencia terapéutica. Una acción que reduciría la presión asistencial sobre los centros de salud y evitaría desplazamientos innecesarios a los pacientes, según explicó. Gómez arengó a la colaboración entre profesionales, y para predicar con el ejemplo, dio una ‘muestra’, el recién estrenado acuerdo entre Sefac y la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (Semergen), para desarrollar la un proyecto de Sistemas Personalizados de Dosificación en Zaragoza previsto para septiembre. Además, Gómez planteó que el congreso debe ser un foro de debate, ya que “no avanzaremos si no ponemos en duda nuestros propios planteamientos”.
Por otro lado, el presidente de Sefac Aragón, Eduardo Satué, mostró su “alegría y emoción tras dos años de preparación”. Aunque destacó que en estos dos años, han pasado muchas cosas, de hecho afirmó “estamos perdiendo relevancia sanitaria”, aunque “es duro decirlo”, reconoció. Para Satué, los farmacéuticos “hemos consentido en ser niños demasiado tiempo, dejándonos llevar por la Administración o la industria, y ha llegado el tiempo de hacerse mayor”. Así, reconoció que es necesario hablar de temas tabú, como qué puede hacer el farmacéutico en la dispensación. Satué llamó así a “participar en el debate como sanitarios emancipados, sin alardes pero sin complejos”.
El presidente del COF de Zaragoza, Ramón Jordán auguró que “este congreso va a ser un punto de inflexión”. Jordán definió al modelo de farmacia comunitaria como aquel en el cual “la farmacia llega donde otros profesionales no”, con ello, destacó el logro de permitir un acceso igualitario al medicamento para toda la población. Finalmente, el presidente colegial incidió en que “sería un error imperdonable no utilizar a la farmacia en las estrategias de cronicidad y en los módulos de Atención Primaria”.
Sobre la colaboración entre el COF y la Administración también intervino el consejero de Sanidad, Sebastián Celaya, quien agradeció la colaboración entre ambos agentes. Además, se mostró abierto a los cambios y reconoció que “la hoja de ruta que os habéis marcado tendrá que ser tarde o temprano atendida por las administraciones”.
Modelos internacionales
Las inciativas de otros países también tuvieron cabida, con la participación de la vicepresidenta de la Federación Internacional de Farmacia (FIP), la finlandesa Eeva Teräsalmi, el presidente de la Cámara de Farmacéuticos de Berlín, Christian Belgardt, y la presidenta de la Ordem de los Farmacêuticos de Portugal, Ana Paula Martins.