| viernes, 18 de septiembre de 2009 h |

c. r.

Madrid

El Plan Profarma es una importante medida específica de apoyo a la I+D para la industria española, hasta el punto de que la inversión en investigación y desarrollo efectuada por las empresas farmacéuticas supera a la de los demás sectores industriales. Esta especial relevancia del sector farmacéutico en I+D se traduce en que esta industria realiza el 8,27 por ciento del total de las inversiones de las empresas españolas en este área, según indican datos del INE correspondientes a 2007. Timoteo de la Fuente, subdirector general de Políticas Sectoriales Industriales del Ministerio de Industria, explica las claves del nuevo plan.

Pregunta. ¿Qué valoración hace del Plan Profarma 2005-2008?

Respuesta. El Plan Profarma 2005-2008 ha alcanzado los principales objetivos que se plantearon en su gestación. En primer lugar, se ha llegado a la cifra de 3.000 millones de euros en gastos e inversiones en I+D acumulados durante el periodo de vigencia del plan. En cuanto a la puesta en el mercado de entidades químicas, durante el último Profarma se autorizaron 60 nuevos principios activos y se logró también que el 35 por ciento de los gastos e inversiones en I+D se realizasen a través de colaboraciones externas o gastos extramuros con centros públicos o privados españoles. Asimismo, logró una cifra cercana a los 400 millones de euros anuales en inversiones totales, de las que alrededor del 50 por ciento se destinaron a la producción de especialidades farmacéuticas y entorno al 10 por ciento a I+D.

P. ¿Cuántas compañías se han presentado a este plan?

R. En la convocatoria del año 2005 se presentaron 58 empresas. Un año después fueron 53, y en los años 2007 y 2008 se presentaron 50 en cada uno.

P. ¿Qué aporta el nuevo Plan con respecto al anterior?

R. El Ministerio de Industria, Turismo y Comercio quiere potenciar en este nuevo Programa la producción en España, la creación de empleo y atraer proyectos de producción internacional que ayuden a reducir el déficit de la balanza comercial. A pesar de que el Profarma sigue siendo un programa en el que se valora la investigación e innovación, en la convocatoria 2009-2012 se han querido primar también aspectos de tipo industrial, y se valorará no sólo el esfuerzo en I+D sino también el compromiso con la producción y el empleo.

P. ¿Por qué se da más peso a la parte industrial en esta ocasión?

R. Creemos que se hace más I+D cuando existe una mayor implicación industrial, y por eso queremos favorecer a los que apuesten por nuevas plantas de producción o la ampliación y por el crecimiento de las que tienen actualmente en marcha. Dentro de los compromisos que aspira a conseguir el nuevo Profarma, se ha fijado el objetivo de alcanzar los 14.900 puestos de trabajo en producción en la convocatoria 2012, mejorar la calidad en el sector y reducir el déficit de la balanza comercial farmacéutica hasta alcanzar 2.400 millones de euros en la convocatoria 2012.

P. ¿Qué tendrá más importancia para la valoración final, la puntuación sobre recursos o la de resultados?

R. La evaluación de las empresas para su posterior clasificación se realizará teniendo en cuenta sus objetivos, recursos y resultados tanto industriales, económicos y de I+D+i. La valoración final será una ponderación de todos estos aspectos. En el ámbito de los recursos se valorará la existencia de planta industrial, la inversión en nuevas plantas o la ampliación de las existentes, si tienen centro propio de I+D, la inversión en nuevos centros de I+D o ampliación de los existentes, el porcentaje de gastos en I+D sobre ventas de prescripción, el equipo humano de I+D y de producción y control, la participación en consorcios nacionales e internacionales de I+D y la existencia de colaboraciones externas de investigación con centros públicos y privados de España.

P. Y la de resultados…

R. En cuanto a los resultados, en el nuevo Plan Profarma se valorará la creación de nuevos puestos de trabajo, tanto fabriles como de investigación, el número de nuevas entidades en estudio y de formas farmacéuticas, la transferencia de tecnología derivada de la concesión de licencias, las patentes derivadas de la investigación, la realización de ensayos clínicos en España y la mejora de las balanzas comercial y tecnológica.