j.a. r. Barcelona | miércoles, 23 de marzo de 2016 h |

Julian Tompkins inició su carrera en Ashfield en 2005 como consejero del Reino Unido y, tras la adquisición de Pharmexx por parte de la citada compañía, se convirtió en presidente regional. Un cargo que le ha permitido observar los importantes cambios que se han producido en el sector de la industria farmacéutica en los últimos años.

Pregunta. ¿Cuáles están siendo las principales líneas de trabajo de su compañía ?

Respuesta. Estamos muy enfocados en ofrecer servicios a los pacientes, ya sea a través de canales digitales o de call centers. Queremos poner el foco en el paciente para mejorar aspectos que consideramos clave, como es la adherencia al tratamiento.

P. ¿Por qué es tan importante fomentar una cultura empresarial centrada en el paciente?

R. Cada vez hay menos diferencia entre los productos de las compañías. Las diferencias en la eficacia de las terapias se derivan de la adherencia al tratamiento, de si el paciente está tomando el fármaco de la manera adecuada, de cómo maneja las complicaciones… Por eso las empresas se están dando cuenta de que deben ofrecer un valor añadido a sus productos. En este sentido, estamos viendo un crecimiento exponencial de los servicios orientados al paciente en los últimos tres años.

P. ¿Uno de los principales retos a los que se enfrenta el sector es el de la incorporación de la innovación?

R. Yo considero que el mensaje clave es que la innovación nunca es cara si ayuda a salvar vidas, si mejora la calidad de vida de los pacientes, si un paciente que no podía trabajar logra volver a desempeñar su actividad laboral.

P. Su compañía también ofrece servicios orientados al Market Access. ¿Cuál es la mejor estrategia en un país con un acceso al mercado tan complicado como España?

R. En primer lugar diría que España no me parece un país más complicado que otros en este aspecto. Cada país tiene sus propias complicaciones. La clave para tener éxito en el acceso al mercado es demostrando el valor de la innovación. Si demuestras que un nuevo fármaco reduce las complicaciones y, por tanto, ahorra costes al sistema, le estás dando mucho valor al producto.