El grupo farmacéutico francés presentó los que serán los pilares de su negocio de aquí hasta 2015

Confía en la austeridad, en los resultados de Genzyme, en sus áreas de crecimiento y en los mercados emergentes

| 2011-09-09T16:13:00+02:00 h |

redacción

París

El CEO del grupo farmacéutico francés Sanofi, Christopher Viehbacher, valoró los objetivos a largo plazo de la farmacéutica y manifestó que “la compañía está a punto de embarcarse en un periodo de crecimiento constante y sostenible”. La multinacional ha desvelado los que han sido, son y serán sus pilares de negocio hasta 2015, y así lo refleja un documento que recoge sus intenciones para sobrevivir y salir airoso de la complicada situación económica en la que también está inmersa el sector farmacéutico.

La definición de esos objetivos expuestos por Viehbacher da muestras de lo que parece una máxima para la compañía: renovarse o morir. Y es que, desde 2008 la multinacional se encuentra inmersa en un proceso de transformación que se ve apremiado por la caída de patentes en Estados Unidos de dos de sus productos clave: Plavix y Avapro.

Este ha sido un hecho determinante para la fijación de los objetivos para 2011-2012. Un periodo en el que se espera, además, una fuerte caída en las ventas de sus principales productos (se prevé un decrecimiento de 3.000 millones de euros, frente a los 7.600 obtenidos en 2008). Para sobreponerse, Sanofi pretende valerse de las ventas que reporten sus plataformas de crecimiento y los beneficios reportados desde su adquisición estrella, Genzyme.

Pero las miras de la farmacéutica francesa no se han quedado ahí. Durante el periodo 2012-2015 Sanofi espera avanzar en su modelo de negocio, basado en esta tendencia que ha marcado ese hasta ahora su exitoso proceso de transformación. Para consolidarse y custodiar ese futuro, Sanofi se propone retos grandes y concretos que se basan en estrictas políticas financieras y en el desarrollo de un nuevo modelo de I+D.

En este sentido, durante esos tres años la multinacional se centra en los 19 compuestos más desarrollados de su pipeline. De ellos, espera que al menos seis reciban la aprobación antes de marzo del próximo año. Unos logros que comenzarían a reportar un monto económico válido para aliviar al Sanofi de las grandes pérdidas antes anunciadas y que se complementarían con la imposición de una dura política fiscal que continuaría marcada por el programa de control de costes impuesto por la multinacional en 2009. Desde Sanofi confían en este proyecto, que ha logrado sus objetivos dos años antes de lo previsto.

Para continuar con el empujón que necesita la compañía para sobreponerse a la difícil situación que se les presenta, desde Sanofi confían en que el nivel de ventas se vea encabezado por los resultados obtenidos en sus plataformas de crecimiento, Genzyme y los mercados emergentes. Algo con lo que, para 2013, esperan poder retomar el nivel de ventas alcanzado en 2008.