entrevista/ Tumores del estroma gastrointestinal

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| viernes, 18 de mayo de 2012 h |

Pregunta. En los últimos años se han producido avances en el abordaje de los tumores del estroma gastrointestinal, ¿Qué retos son los que se plantean en el tratamiento y curación de este tipo de tumores?

Respuesta. En los últimos diez años hemos asistido a un avance sin precedentes en el tratamiento de los tumores del estroma gastrointestinal o GIST, como se les denomina habitualmente, en los pacientes que se encuentran en fase avanzada. La incorporación de nuevos fármacos dirigidos a dianas moleculares, especialmente Imatinib, ha permitido triplicar la supervivencia de los pacientes. No obstante, existe una mayoría de pacientes cuyos tumores acaban haciéndose resistentes a imatinib, generalmente a los dos o tres años de tratamiento. Sunitinib ha demostrado ser efectivo en estos pacientes, aunque muchos de ellos progresan posteriormente. En estos pacientes con GIST resistente a estos dos fármacos, no existen alternativas terapéuticas disponibles aprobadas y su tratamiento constituye hoy en día un problema esencial en el control de esta enfermedad.

P. ¿Cómo actúan contra este tipo de tumores los tratamientos con imatinib y sunitinib?

R. Son fármacos que actúan inhibiendo unas vías moleculares que están activadas de forma anómala y desempeñan un papel fundamental en el desarrollo del GIST. Estas vías están reguladas por un gen, KIT, o alternativamente, el gen del receptor de crecimiento derivado de las plaquetas (PDGFR), que codifican receptores tirosina quinasa, que se encuentran constitutivamente activados en el GIST. Al inhibir estas vías, estos fármacos producen el bloqueo de la progresión del tumor, con respuestas y estabilizaciones que pueden prolongarse durante años.

P. ¿Qué aporta regorafenib para el tratamiento de tumores del estroma gastrointestinal que no aportaran los tratamientos antiguos?

R. Es el primer fármaco que ha demostrado, en un gran estudio randomizado comparado a placebo, que es activo y capaz de aumentar la supervivencia libre de progresión en los pacientes resistentes a los dos tratamientos disponibles hasta ahora, imatinib y sunitinib.

P. ¿Cómo actúa el fármaco activo en este tipo de tumores?

R. Es un potente inhibidor de varios receptores tirosina quinasa que juegan un papel importante en el desarrollo tumoral. Entre estos receptores se encuentran los codificados por los genes KIT y PDGFR, esenciales en el GIST, así como VEGFR, FGFR1, RET y B-RAF. La inhibición de estas vías moleculares es capaz de producir un efecto antitumoral incluso en los pacientes con GIST que son refractarios a los inhibidores tirosina quinasa de primera generación, como imatinib y sunitinib.

P. ¿Qué ventajas puede ofrecer el uso de este inhibidor a los pacientes?

R. Puede constituir una opción terapéutica activa en una fase en la que no existía hasta ahora un tratamiento establecido. En el estudio ha mostrado aumentar la supervivencia libre de progresión de estos pacientes. Debemos esperar a los resultados completos del estudio y a la puesta en marcha del proceso de evaluación de las agencias regulatorias, pero abre una vía muy prometedora en el tratamiento de los pacientes que se han hecho resistentes a los fármacos convencionales.

P. ¿Cómo aumenta su calidad de vida?

R. El hecho de que el paciente se encuentre libre de progresión tumoral por efecto del fármaco se asocia generalmente a una mejoría clínica que puede ser importante. Por otro lado, el perfil de tolerancia es con frecuencia favorable, muy superior al de la quimioterapia tradicional. Ambas cosas contribuyen a mantener la calidad de vida del paciente en una fase avanzada de su enfermedad.

P. ¿Qué supone que Regorafenib haya recibido recientemente la condición de ‘fast track’ por parte de FDA para el tratamiento de pacientes con tumores del estroma gastrointestinal?

R. La designación de “Fast Track” por parte de la FDA es un proceso que tiene por objeto facilitar el desarrollo y la revisión de fármacos destinados a cubrir una necesidad no cubierta en el tratamiento de una enfermedad grave. El hecho de que Regorafenib haya recibido esta condición es una buena noticia, ya que indica el interés del fármaco y puede suponer una agilización en su desarrollo y aprobación, que permitan que el fármaco se incorpore más pronto a la clínica

P. ¿Se está aplicando ya Regorafenib en la práctica clínica habitual?

R. Hasta ahora se ha aplicado únicamente dentro de estudios clínicos de investigación. Esperamos que puedan abrirse lo antes posible vías de acceso al fármaco para los pacientes que podrían beneficiarse del fármaco.

P. ¿Qué supone su utilización en los pacientes con cáncer colorrectal metastásico?

R. Los resultados preliminares del estudio CORRECT muestran que Regorafenib mejora la supervivencia global de los pacientes que han progresado tras recibir los tratamientos estándar disponibles para el cáncer colorrectal avanzado. Esto supone un paso importante frente a una enfermedad que afecta a un número muy elevado de pacientes que habían agotado los tratamientos convencionales.

P. ¿Qué ventajas les aporta con respecto a los antiguos tratamientos?

R. En cáncer colorrectal, Regorafenib es activo cuando los tratamientos convencionales ya han dejado de serlo y además posee un perfil de tolerancia en general más favorable que el de la quimioterapia habitual.

P. ¿Cuál es el futuro que se plantea en este campo de investigación?

R. En GIST, estos resultados abren la puerta a nuevas investigaciones con el objetivo de optimizar el rendimiento del fármaco, como son la búsqueda de marcadores moleculares que permitan seleccionar mejor a los pacientes, o la posibilidad de utilizarlo en una fase más precoz de la enfermedad.

“El fármaco inhibe varios receptores responsables del desarrollo tumoral”

“Regorafenib muestra progresos en pacientes que ya han agotado los tratamientos estándar”