| viernes, 18 de marzo de 2011 h |

Pilar Farjas

No ha habido avances a nivel político en el asunto del catálogo desde que el Ministerio de Sanidad y la Xunta de Galicia se reunieran en Santiago de Compostela. Las negociaciones están encalladas por las posturas inamovibles de ambas partes: para el ministerio el diálogo parte de la disposición de la Xunta a modificar su ley de racionalización del gasto farmacéutico. Para la Xunta el diálogo empieza a partir de “nuevos planteamientos” por parte del ministerio y de un discurso “sin rehenes”. Dice Galicia que defiende el catálogo por responsabilidad con sus ciudadanos y con el sistema sanitario. Ser responsable es acabar con la instrumentalización política del catálogo, es intentar llegar a un acuerdo sea como sea. Desde luego que el plantón no es una respuesta responsable.