| viernes, 03 de junio de 2011 h |

Mariano Rajoy

Que el líder del PP no tuviera conocimiento de la deuda sanitaria mientras comía con los barones regionales de su partido no tiene sentido. Su discurso durante la Cumbre Mundial Médico-Enfermera lo desmiente, como también lo desmiente el hecho de que una de sus más cercanas colaboradoras es Ana Pastor. Pero, al margen de si hubo sorpresa o no, en esa reunión se habló de Sanidad. El peso del gasto sanitario tuvo que estar presente, por fuerza, en una reunión que tenía como objetivo hacer frente común en las prioridades de los nuevos gobiernos regionales, y cuyo primer mandato es auditar las cuentas socialistas en busca de facturas en los cajones. Entonces, ¿por qué no hay mención a la Sanidad en el documento programático que salió de esa reunión?