| viernes, 11 de marzo de 2011 h |

Boi Ruiz

Nadie a estas alturas espera que los planes de medidas, urgentes o no, elaborados por organismos autonómicos para garantizar la sostenibilidad del SNS deparen buenas noticias. La situación de la Consejería de Salud de Cataluña es crítica, como lo es la de las 16 administraciones restantes. Está claro que hay que tomar medidas. De lo que se trata es de que las medidas no sean unilaterales. El ‘decretazo’ debe acabar, por el bien del SNS que todos quieren mantener. En manos del consejero de Boi Ruiz está que las medidas que se adopten en Cataluña se consensúen con el sector farmacéutico. Si la imposición ‘se impone’, la única consecuencia lógica será la profundización en el desequilibrio del sector farmacéutico, que ha tenido hasta ahora en Cataluña un seguro servidor.