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La proteína peroxirredoxina 2 (PRDX2) se postula como predictora de riesgo de metástasis pulmonar en pacientes con cáncer de mama, según avala un estudio del Instituto de Investigación Biomédica de Bellvitge (Idibell).
Según publican en Oncogene, las células cancerígenas que provocan la metástasis presentan altos niveles de expresión de esta proteína, que las protege del estrés oxidativo y promueve su crecimiento y proliferación.
Tras realizar el análisis en líneas celulares, hicieron la comprobación in vivo en ratones en los que silenciaron la proteína. “Cuando reducimos al máximo la expresión de PRDX2, logramos inhibir la metástasis pulmonar en los ratones en los que hemos inducido un tumor de mama”, señala Ángels Sierra, coordinadora del Grupo de Claves Biológicas del Fenotipo Invasivo y Metastático del Idibell.
En concreto, de un total de siete ratones, sólo uno desarrolló metástasis, respecto al cien por cien del grupo al que se indujo el tumor con la proteína sobreexpresada.
Ahora, están realizando un ensayo con 120 muestras, que pretenden ampliar con la colaboración de varios centros, para validar los datos y valorar una modificación terapéutica.