El director del instituto compareció en el Congreso para explicar las líneas de I+D
La Comisión Mixta no ha despejado las dudas sobre la ubicación del centro
carlos b. rodríguez
Madrid
Comparecía para explicar las líneas de investigación de su departamento, pero las intervenciones de los portavoces de la Comisión de Sanidad del Congreso no tenían nada que ver con lo que expuso José Jerónimo Navas, director del Instituto de Salud Carlos III. El decreto de 30 de abril por el que se crea la Comisión Mixta no ha despejado las dudas que buena parte de la oposición mantiene sobre la ubicación actual del instituto.
A ello se suma un punto importante, y es que hasta hace unos meses el Ministerio de Ciencia e Innovación todavía mantenía las competencias de Universidad. Con su paso a Educación, ya son dos los departamentos con los que el Carlos III tiene que coordinarse. El Grupo Parlamentario Catalán siempre ha sido defensor de la creación del Ministerio de Ciencia, aunque en la situación actual, su portavoz de Sanidad, Concepció Tarruella, planteó que la coordinación “quizá hubiese sido más fácil” si el instituto hubiera continuado en Sanidad. “El Carlos III es mucho más que la función investigadora”, añadió.
El mismo punto de vista lo expresó el diputado popular Antonio Gutiérrez. Este grupo mantiene que fue una equivocación el cambio de ministerio y que el Carlos III no puede seguir fuera del ámbito sanitario. “Podemos correr el riego de que el Ministerio de Sanidad se convierta en una especie de estructura que no tenga otra cosa más que ser férreamente burocrática y que sea incapaz de gestionar las funciones no administrativas o no regulatorias, a la vez que también sea poco capaz de captar y retener cuadros sanitarios o de ciencias de la salud capaces de soportar los nuevos retos científicos que exige el Gobierno del SNS, sobre todo ante la carencia de organismos agenciales o funcionales que desde hace ya muchos años tenía y usa el Instituto de Salud Carlos III”, alertó Gutiérrez.
“Estábamos aislados”
Nada más lejos de la realidad, en opinión de Navas. El director del Carlos III respondió a los portavoces que “lo fundamental es la función y no la ubicación”. En su opinión, el diseño no sólo no es perjudicial para el instituto, como insinuó el Grupo Popular, sino que le añade valor en muchas facetas, como en la relación con otros organismos públicos de investigación. “Estábamos aislados en Sanidad (…). El Carlos III tiene una oportunidad única estando en el Ministerio de Ciencia para liderar la investigación en ciencias de la vida y la salud de todo el país, algo que antes no hacía”. Ejemplo de ello, y de la coordinación que existe con el Ministerio de Sanidad, es el manejo de la gripe A y la comunicación diaria que existe entre los dos organismos.
El director del Carlos III insistió en el papel creciente del instituto en todo el conglomerado de la I+D biosanitaria española con otros datos. En concreto, destacó las tres nuevas acciones que conforman su línea de acción: la participación y cofinanciación de los institutos de investigaciones sanitarias acreditadas; la creación de la red de biobancos y la red de innovación en tecnologías sanitarias y material sanitario.
“En el Carlos III estamos dedicando el 95 por ciento a la innovación farmacológica, y hay que seguir con ella, pero el sistema español de ciencia y tecnología puede posicionarse en el sector no farmacológico de equipamientos, dispositivos y reactivos materiales, innovar y mejorar nuestra balanza de pagos tecnológica”, afirmó.
También tuvo otras palabras para la industria farmacéutica, la “segunda fuente de financiación” del instituto, con una aportación de 105 millones de euros anuales. En este sentido, el portavoz del PSOE, Alberto Fidalgo, recordó la “predicción e incluso la planificación” que permite este sistema frente a las “aportaciones aleatorias” que regían el pacto del Partido Popular y que “podían sumar” a las arcas del instituto “61 millones de euros”.