J. Nieto Madrid | viernes, 05 de diciembre de 2014 h |

Continuidad del trabajo realizado hasta el momento y diálogo con los profesionales sanitarios. Estas han sido las dos recetas prescritas por el nuevo consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, el licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad Autónoma de Madrid y especialista en Medicina del Trabajo, Javier Maldonado, que fue la persona designada por el presidente regional, Ignacio González, para ocupar el puesto del ‘dimitido’ Javier Rodríguez. Un reto que, tal y como afirmó, afronta “con ilusión, compromiso, trabajo y diálogo, mucho diálogo”.

En este sentido, durante la toma de posesión, que se llevó a cabo el 5 de diciembre en la Real Casa de Correos, sede de la presidencia madrileña, Maldonado, que hasta ahora había sido viceconsejero de Asistencia Sanitaria de la consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid, prometió “mantener los altísimos niveles de calidad de la Sanidad madrileña”. Una promesa que dejaba entrever su intención de “continuar” con la labor realizada por su antecesor en la consejería de Sanidad madrileña.

Precisamente, sobre la labor realizada por Rodríguez al frente de la consejería, Maldonado reconoció que desde que se hizo cargo de esta responsabilidad, el 28 de enero de 2014, le ha tocado vivir “momentos extraordinariamente complicados”. Pese a ello, alabó la capacidad de su antecesor en el cargo para, tal y como destacó, “trasladar a su equipo el mando y la tranquilidad necesarias para poder trabajar y adoptar las mejores decisiones”.

Por ello, y tras reconocer su “cariño, gratitud y reconocimiento” al ya ex consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, consideró que se abre una nueva etapa en el que “más que nunca es imprescindible garantizar la continuidad con el trabajo ya realizado, seguir avanzando en alinearnos todos, los profesionales, gestores y administraciones, en reafirmar el liderazgo del sistema sanitario público madrileño.”

Codo con codo

Para lograr este objetivo, el nuevo consejero de Sanidad madrileño mostró su compromiso de mantener el diálogo con los profesionales sanitarios, con los que, tal y como precisó durante su discurso de toma de posesión, ha trabajado y trabajará “codo con codo”. Así, hizo un guiño al precisar que cuenta en su equipo con “los mejores directores y gestores con talento, oficio y experiencia” y, por encima de todo, “con los mejores profesionales de la Sanidad pública madrileña”. Unos profesionales a los que calificó como “un orgullo” para la sociedad.

Sobre este particular, el nuevo máximo responsable de la Sanidad madrileña incidió en lo que será la base sobre la que se sustentará su labor en la consejería de aquí hasta, al menos, las elecciones del mes de mayo: el trabajo junto a los profesionales sanitarios. “Con ellos hemos trabajado, trabajamos y trabajaremos juntos, siempre juntos, codo con codo, día a día. Este es mi compromiso”, manifestó.

Destitución

La llegada de Maldonado a la consejería de Sanidad madrileña se produjo dos días después de que Rodríguez volviese a pronunciarse sobre la auxiliar de enfermería Teresa Romero, que se infectó por ébola tras atender al misionero Miguel Pajares en el Hospital Carlos III. Así, el que era máximo responsable de la Sanidad madrileña volvió a defender el pasado miércoles su gestión de este caso y, para ello, indicó que si él “lo hubiese hecho mal Teresa Romero no estaría hablando”. Todo ello un día después de que España quedase oficialmente libre de ébola al cumplirse 42 días desde el segundo negativo de Romero, como establecen los criterios de Organización Mundial de la Salud (OMS).

Unas palabras que se sumaban a declaraciones anteriores del ya ex consejero que han provocado incluso que la auxiliar de enfermería interpusiese una demanda civil por la que solicitó una indemnización de 150.000 euros a Rodríguez por atentar “gravemente” a su honor por las acusaciones “falsas” que el máximo responsable de la Sanidad madrileña realizó en relación a su contagio del virus al manifestar que pudo haber mentido con sus síntomas.

Estas nuevas declaraciones de Rodríguez fueron la gota que colmó el vaso de la paciencia de un presidente regional que ya había recibido ‘presiones’ desde el propio PP para tomase la decisión de destituir a su consejero de Sanidad. Así, y tras pedirle su dimisión, Rodríguez la aceptó de forma inmediata. Pese a ello, González agradeció a Rodríguez “su dedicación y su extraordinario trabajo” al frente de la consejería de Sanidad, así como la “magnífica gestión” que realizó desde su nombramiento.

Cabe destacar que la destitución de Rodríguez no ha sido la única que se produjo en la consejería de Sanidad de madrileña. Así, Belén Prado, que hasta ahora era viceconsejera de Ordenación Sanitaria e Infraestructuras, también ha dejado un cargo que ostentaba desde el 10 de abril de 2008.

Ser consejero de Sanidad en la Comunidad de Madrid es una profesión de riesgo. O, al menos, breve. Y es que, tras la dimisión de Javier Rodríguez como máximo responsable de la Sanidad madrileña, han sido tres las personas que han ocupado este cargo. Tres ‘javieres’: Fernández-Lasquetty, Rodríguez y Maldonado.

18/03/2010. Tras la dimisión presentada por Juan José Güemes, la entonces presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, eligió a Fernández-Lasquetty para hacerse cargo de la Sanidad madrileña. ¿Hitos logrados? Por ejemplo, instauró el Área Única Sanitaria e implantó la Ley de Libertad de Elección. La paralización definitiva de la externalización de seis hospitales públicos provocó su salida de la consejería el 27 de enero de 2014, ya con Ignacio González como presidente regional.

28/01/2014. Fernández-Lasquetty fue sustituido por Rodríguez, que casi un año más tarde, el 4 de diciembre de 2014, aceptó la ‘recomendación’ de presentar su dimisión. Su gestión de la crisis del ébola y sus declaraciones sobre la auxiliar de enfermería Teresa Romero provocaron su salida.

5/12/2014. Otro Javier, Maldonado, releva a Rodríguez en la consejería. Hasta las elecciones de mayo tiene seis meses por delante para demostrar su valía.