| viernes, 23 de marzo de 2012 h |

La hematología es una de la especialidades médicas más desconocidas por el público general, a pesar de la gran cantidad de áreas que desarrollan estos expertos. Esta idea fue corroborada por Carmen Burgaleta, presidenta de la Sociedad Española de Hematología y Hemoterapia, durante el programa Salud Hoy, emitido el pasado viernes. “Nosotros percibimos que no es la especialidad más conocida, quizá porque al tratar de la sangre, un elemento que circula por todo el organismo y que implica muchos aspectos, resulta más compleja de darse a conocer. Además, se ha ejercido muy poco en el ámbito privado, destacando más en el público”.

La gente no recuerda, por ejemplo, que estos médicos han recibido numerosos premios Nobel por trabajos o investigaciones efectuados en el campo hematológico. Uno de los más recientes fue otorgado a Edward Donnall Thomas, que recibió en 1990 el Premio Nobel de Medicina en 1990 por ser pionero en el trasplante de médula ósea para tratar la leucemia. “La medicina del trasplante, por ejemplo, ha evolucionado bastante y nos sorprende que no se hable de ella. De hecho, hace unos años cuando se tenía leucemia el índice de supervivencia era de alrededor de un mes y ahora se cura en un alto porcentaje o incluso ciertos procesos agudos se han convertido en crónicos”. La doctora hizo hincapié en este último punto resaltando que éste ha supuesto uno de los grandes pasos dentro de la medicina, en el que además los hematólogos han participado, sobre todo, por su análisis de la sangre.

Burgaleta destacó que la hematología abarca cuatro áreas fundamentales: de diagnóstico, clínica, de trastornos hemorrágicos y de terapia transfusional. En general, en todos estos apartados se ha avanzado mucho y la presidenta recordó cómo en nuestro país la hematología adquirió cierta importancia debido a los casos de hemofilia que arrastraba la casa real.

La hematóloga destacó que en materia de transfusiones los avances son muy numerosos, y recordó además que hoy día en un hospital de tamaño medio se pueden realizar alrededor de 10.000 transfusiones en un año. “Actualmente hemos logrado evitar que los neonatos padezcan hemólisis por incompatibilidad de grupos sanguíneos, existen vacunas, campañas de prevención, etc.”, añadió.

Por último, la portavoz matizó que las consultas de los hematólogos suelen llenarse vía urgencias, por la complicación de algún trastorno común; por el estudio de pruebas hematológicas, donde se detectan las primeras alarmas; o por pacientes desviados de otros especialistas.