arturo díaz del campo
Madrid
Los antivirales para el tratamiento de la gripe A, Tamiflu y Relenza, regresaron la semana pasada a las farmacias tras haber sido únicamente dispensados en el ámbito hospitalario desde finales de abril. Un vuelta al canal normal que se llevó a cabo sin grandes sobresaltos, lejos de una hipotética demanda desmesurada que fue lo que provocó su retirada de las boticas.
Así, salvo los retrasos a la hora de recibir los antivirales que se produjeron en algunas provincias y casos aislados de pacientes que acudieron a la botica para adquirir el fármaco sin la necesaria receta, todo se desarrolló por cauces normales. Respecto a los pacientes que acudieron a la farmacia sin receta, el presidente de FEFE, Fernando Redondo, indicó que se trató de “casos aislados, porque las campañas de información han sido buenas”. Tanto FEFE como el COF de Valencia anunciaron que harán un seguimiento de la actitud de los pacientes a la hora de solicitar el fármaco.
La comunidad farmacéutica se mostró satisfecha con el regreso de los antivirales a la oficina de farmacia. Así, Redondo consideró que era “mejor para el paciente, ya que la dispensación por otros cauces tiene a veces menos control”. En el mismo sentido se pronunció Juan de Dios Moscardó, vocal del COF de Valencia. “Aunque fuera muy buena la distribución en ambulatorio, con la oficina de farmacia llega a todos los sitios”, dijo.