El director general de Farmacia escuchó las quejas de industria, distribución y oficina de farmacia
Los distintos agentes reiteraron sus quejas ante las medidas de recorte del gasto público en medicamentos
Unas cifras espectaculares
Infarma 2011 cerró sus puertas con unas cifras espectaculares: más de 23.000 visitantes (7,2 por ciento más que en 2009); un 22 por ciento más de congresistas (2.234); y un incremento del 10 por ciento en el número de expositores (206). “Es quizá lo único positivo en cifras que hemos oído estos días”, bromeó Carmen Peña, presidenta del Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos, que valoró este evento como la “gran tarjeta de visita de la farmacia española, que tiene mucho presente y futuro”.
Por su parte, Alfonso Jiménez, director general de Farmacia del Ministerio de Sanidad, declaró durante la clausura de este evento que estos foros “son imprescindibles para seguir avanzando, y más en estos momentos”. Además, agradeció en nombre del ministerio la aportación de colectivos que como los farmacéuticos juegan un papel muy relevante en el presente y sobre todo en el futuro del sector sanitario. “Si no aunamos las fuerzas, los que estamos interesados en la sostenibilidad del sistema lo tendremos mucho más difícil”, resaltó, convencido de que en unos años se podrá decir todavía que España tiene uno de los mejores sistemas sanitarios del mundo.
Jordi de Dalmases, presidente del Colegio de Farmacéuticos de Barcelona, que hizo mención a los 500 años de la creación de la primera farmacopea, dijo confiar en la rápida adaptación del sector al panorama que deje la crisis.
Francisco rosa
Barcelona
Los organizadores de Infarma dejaron para el final el plato fuerte, la mesa de debate que, bajo el título “Futuro del sector farmacéutico: visión estratégica de los agentes implicados”, contó con la presencia de los presidentes del Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos, Carmen Peña; Fedifar, Antonio Mingorance; y Farmaindustria, Jordi Ramentol; así como la del director general de Farmacia, Alfonso Jiménez Palacios, al que trasladaron sus quejas por la política de recortes del Ministerio de Sanidad.
A este respecto, en el transcurso de la mesa moderada por el presidente de los farmacéuticos catalanes, Jordi de Dalmases, Peña constató la dependencia de los farmacéuticos respecto del SNS, dado que el 80 por ciento de su actividad discurre en colaboración con la función pública. En este sentido, advirtió de que los farmacéuticos, “como profesionales sanitarios que somos, tenemos que apechugar con los recortes, dado que las cuentas públicas no están bien, pero tenemos que exigir que también se piense en nosotros a la hora de aplicar soluciones”.
Por su parte, Mingorance indicó que los recortes de precios de los medicamentos del Gobierno y las medidas unilaterales de las comunidades que limitan la prescripción y dispensación de fármacos financiados por el SNS “están comprometiendo la viabilidad económica de los agentes del sector, entre ellos, de las empresas de distribución”. Sobre este punto, advirtió de que “cuando pasen las próximas elecciones podremos ver nuevos inventos para reducir el gasto farmacéutico”.
La tercera pata del banco de la cadena del medicamento, la industria, también se mostró muy crítica. Así, Ramentol afirmó que España dedica un 1,4 por ciento de su PIB a I+D, 130.000 millones de euros, y que de ellos, la industria aporta un 21,7 por ciento. “El Gobierno no repara en que cada vez que aprueba un nuevo RD reduce esa capacidad”, afirmó.
Las críticas fueron respondidas por el secretario general de Sanidad que manifestó que desde el ministerio “no se ve al sector como un enemigo, ya que estamos todos en el mismo carro”. Asimismo, respecto a la situación de la oficina de farmacia precisó que “su futuro depende de que se consolide su papel sanitario, vinculado al SNS. Es una pieza clave”.