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El área única está “plenamente legitimada” para el consejero de Sanidad madrileño, Javier Fernández-Lasquetty, pues la sentencia emitida del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) se refiere sólo a un precepto secundario que determina que “el director del centro de salud se establecerá, mediante convocatoria pública, entre profesionales sanitarios” con lo que cualquiera, sea facultativo o no, puede optar al puesto.
Según explicó tras el último Consejo de Gobierno, el departamento técnico de la consejería está estudiando la opción de interponer un recurso de casación, aunque matizó que hasta ahora no se ha producido ningún problema pues. Tras la aprobación de la norma, los mismos coordinadores de los centros pasaron a ser los directores hasta que se realizara la convocatoria de plazas —prevista para salir en breve tras la resolución del concurso de traslados— y de estos 230 directores provisionales sólo 13 son enfermeros porque ningún médico quiso asumir el cargo.
Sin embargo, la resolución del TSJM sí anula el decreto aprobado a finales de 2010 —por el que se establecieron las estructuras básicas sanitarias y directivas de AP en Madrid eliminando las 11 áreas sanitarias— considerando que “no es conforme a derecho” tras estimar “parcialmente” el recurso contencioso administrativo interpuesto por la Sociedad Madrileña de Medicina Familiar y Comunitaria (Somamfyc), la Asociación Madrileña de Pediatría de AP (Ampap), el Colegio de Médicos de Madrid y la central UGT, desestimando la petición de ésta última de inconstitucionalidad de la norma. La sentencia considera que el artículo 9, al que hizo referencia Lasquetty, contradice varios artículos de la Ley de Ordenación de las Profesiones Sanitarias (LOPS) según los cuales las funciones atribuidas a los directores de centro sólo pueden ser desempeñadas por un facultativo, reflexión que ha sido aplaudida por las organizaciones médicas, mientras que el Colegio de Enfermería ha anunciado que la recurrirá.
