La asesoría de oficinas de farmacia Asefarma celebró la semana pasada una jornada sobre herramientas que agilizan y facilitan el trabajo

Además de facilitar la gestión de ‘stocks’, estos sistemas permiten un mayor control de caducidades y evitan errores de dispensación

| 2011-02-04T15:33:00+01:00 h |

i.g.

Madrid

Mejorar la rentabilidad de la oficina de farmacia. Éste es uno de los objetivos que persigue este sector, que en los últimos años ha visto disminuir sus márgenes de beneficio como consecuencia de la actual situación económica, que se ha traducido en medidas de recorte del gasto farmacéutico. Por ello, desde Asefarma animan a la farmacia a renovarse y adaptarse al nuevo escenario.

Con este motivo, esta asesoría de farmacias, cuyo eje central en estos momentos es la gestión activa y dinámica, celebró la semana pasada una jornada bajo el título “Contra la crisis la robotización y automatización de las farmacias”, en la que se pretendió acercar a los asistentes un nuevo modo de concebir sus negocios.

A través de un caso práctico se explicaron las ventajas que reportan las nuevas herramientas disponibles para agilizar y facilitar el trabajo en las farmacias. “El resumen final de la robotización es que mejora el rendimiento de la botica”, aseguró Belinda Jiménez, responsable del departamento de Gestión Dinámica de Asefarma.

Esto es posible porque facilita la gestión de stocks y la de compras de la oficina de farmacia, lo que conlleva un mejor aprovechamiento del espacio de almacén. Además, estas herramientas repercuten de forma positiva en el cliente, que recibe una dispensación más activa, al disponer el farmacéutico de más tiempo para atenderle.

No menos importante es que estos sistemas permiten un mayor control de caducidades y evitan muchos errores de dispensación, gracias a que el lector del código de barras identifica perfectamente el medicamento a dispensar por receta. “Es algo que dará seguridad al cliente”, dijo Jiménez, que recordó que iniciativas como la receta electrónica obligan a las farmacias a adaptar sus programas informáticos de gestión a nuevas exigencias.

Una inversión amortizable

“La automatización ayuda en la gestión de la farmacia independientemente del tamaño de ésta”, destacó Jiménez, que incidió en que en el mercado hay distintos tipos de dispensadores adaptables a las necesidades particulares. No obstante, reconoció que se trata de “una inversión importante, pero que está constatado que es perfectamente amortizable”. Desde Asefarma aseguran que en España hay en torno a un 10 por ciento del total de oficinas de farmacias que ya están robotizadas y estiman que en pocos años la cifra va a ir en aumento.