El farmacéutico gana en autonomía y se presume que primará a quien le ofrezca el mejor servicio
| 2011-09-30T16:19:00+02:00 h |

F. rosa/R. CHIVA

Madrid

La figura del farmacéutico va a cobrar más importancia, si cabe, con la entrada en vigor del RDL 9/2011 aprobado en agosto por el Gobierno. La principal novedad de este texto es la extensión a todo el territorio nacional de la prescripción por principio activo (PPA), unida a la obligatoriedad de dispensar el medicamento de precio menor.

Pese a que no se impone al farmacéutico dispensar una EFG, como ocurría anteriormente ante una PPA, en cada agrupación homogenea existen diferentes especialidades genéricas, además de la marca original. ¿Cuál de ellos es el que va a elegir el farmacéutico? Esa es una de las principales preocupaciones de las compañías farmacéuticas del sector en la actualidad, las cuales operaban ya en un mercado caracterizado por una fuerte competencia. Sin embargo, esta situación se va a redoblar con la entrada en vigor del RDL.

Para ello, les servirá la experiencia que han acumulado en este último tiempo, ya que, como constata Ángel Luis Rodríguez de la Cuerda, director general de la Asociación Española de Medicamentos Genéricos (Aeseg), “algunas comunidades autónomas, como Andalucía, ya habían implementado esta medida, por lo que el flujo de prescripción y dispensación por el farmacéutico ya es un tema en el que se ha avanzado”.

Crónicos vs. agudos

Uno de los conocimientos extraídos, y que puede tranquilizar al sector de las EFG, es el patrón que suele seguir el profesional de la farmacia respecto a los enfermos crónicos y los agudos. “El farmacéutico no olvida su papel como profesional de la salud y, en este sentido, cobra mucha importancia el tratamiento al que está adherido el paciente. Cuando una persona lleva meses con una medicación, como es el caso de los crónicos, lo primero es garantizar la adherencia. En el caso de los agudos, se tendrá más en cuenta la intolerancia a determinados excipientes, alergias…”, explica Manuel Garrido, director comercial de Kern Pharma.

Y es el argumento de la adherencia al tratamiento el que puede salvar a las compañías de genéricos de marca, que quedan mermadas con la aprobación del RDL. “El impacto real sería la pérdida de viabilidad de este tipo de productos, solo nos queda agarrarnos a la defensa de la adherencia al tratamiento del paciente crónico como necesidad terapéutica justificada”, reconoce José María Pascual, director general de Adamed.

Otro aspecto que se tendrá muy en cuenta será la innovación que aportan las distintas compañías, la cual se traduce en la anticipación en el lanzamiento de genéricos que aún no han salido al mercado, o la amplitud del catálogo de productos que se pone a disposición del farmacéutico. “Nosotros, por ejemplo, hemos sido los primeros en lanzar la tamsulosina en comprimidos de liberación prolongada”, admite Montserrat Almirall, directora general de Stada.

Esta compañía, además, sabe que otra de las claves es la inversión en actividades de formación y reciclaje del profesional de la farmacia. En este sentido, destaca el ciclo de Jornadas de Farmacia Activa. Dos de ellas ya han tenido lugar en Madrid y Barcelona, y próximamente se celebrarán en Valencia, Bilbao y Sevilla. “También serán importantes las iniciativas que faciliten la labor al farmacéutico y que promuevan su valor como profesional sanitario”, matiza José Luis Ergui, director comercial de Cinfa.

Asimismo, se presupone que las compañías tendrán que redoblar sus esfuerzos promocionales en las farmacias, aunque no todas tienen la misma capacidad para ello. “Aunque quisiéramos, no podríamos. Nuestra capacidad de inversión está mermada por las continuas medidas de recorte. Quizá las que sí podrán hacer esa inversión son las grandes compañías multinacionales”, afirma Garrido.

Esas inversiones se traducen en la solidificación de la imagen de marca, a la cual se atribuyen valores reconocidos y diferenciados que pueden también ayudar al farmacéutico a decantarse. “Esta es el arma de todos los laboratorios farmacéuticos que quieran competir en este mercado”, manifiesta Almirall.

A este respecto, para reforzar esa imagen es importante la inversión monetaria, pero solamente si se sabe canalizar el gasto hacia el ofrecimiento de un buen servicio. “La calidad del servicio y del producto, la calidad de la presentación… Son temas que siempre se van a tener en cuenta. Eso no va a cambiar nunca”, concluye Garrido.

“Contamos con algo de experiencia acumulada en la PPA”

Ángel Luis Rodríguez de la Cuerda, director general de Aeseg. “Es verdad que el farmacéutico gana responsabilidad con la nueva situación, pero contamos ya con la experiencia acumulada en algunas comunidades, como Andalucía, que ya habían implementado la PPA, por lo que es una situación en la que ya hemos avanzado”.

“Es importante ser los primeros en lanzar nuevas EFG”

Montserrat Almirall, directora general de Stada. “Trataremos de ser los primeros en lanzar nuevos genéricos, como ha sucedido recientemente con Tamsulosina en comprimidos de liberación prolongada. Además, nuestro objetivo es ofrecer un amplio vademécum de EFG a precio menor y tejer una relación de largo plazo con la farmacia”.

“La farmacia no va a dejar de elegir el mejor servicio”

Manuel Garrido, director comercial de Kern Pharma. “En el caso de los crónicos, el farmacéutico no va a olvidar la importancia que tiene el tratamiento al que está adherido el paciente. En el de los agudos, se valorarán otros aspectos como la intolerancia a determinados excipientes. Pero el criterio definitivo para elegir será la calidad del servicio”.

“Defenderemos la importancia de la adherencia”

José María Pascual, director general de Adamed. “El impacto de la medida amenaza claramente nuestra supervivencia. Lo normal sería la pérdida de la viabilidad de los genéricos de marca. Solo nos queda agarrarnos a la defensa de la adherencia al tratamiento del paciente crónico como necesidad terapéutica justificada”.

“Hay tratar de facilitar la labor a los farmacéuticos”

José Luis Ergui, director comercial de Cinfa. “Está claro que hay que cuidar el servicio y ofrecer un vademécum de medicamentos lo más amplio posible. Pero ahora es muy importante poner en marcha iniciativas que se dirijan a a facilitar la labor del farmacéutico y que promuevan su valor como profesionales sanitarios”.