José María López Alemany
La reunión de la Asociación Europea de la Industria del Autocuidado (Aesgp) que tuvo lugar la semana pasada en la sede del Ministerio de Sanidad puso de manifiesto las grandes diferencias que, a día de hoy, se mantienen en el ámbito de los medicamentos publicitarios entre España y los países de nuestro entorno.
A pesar de esas diferencias históricas, si algo quedó claro y supone una inyección de optimismo, es la voluntad política del MSC por ayudar a los publicitarios trabajando con ellos en los cambios legales que, para adaptarse a Europa deberán acometerse en los próximos meses.
A pesar de que el ‘despliegue’ de personalidades del MSC en el programa de la jornada quedara reducido a la mitad por la coincidencia de varios actos del sector, fueron continuos los guiños realizados a este sector y culminó con la certeza de que en los próximos meses habrá novedades legislativas que han sido recibidas, a priori, con alegría.
No obstante, aún queda mucho por trabajar tanto en el ámbito del diagnóstico de lo que nos separa de Europa y, especialmente, en lo referido a la legislación y su cumplimiento. Avanzar en la eliminación de la exigencia previa de autorización para variaciones menores (do and tell), retomar los proyectos sobre ‘marcas paraguas’ y cumplir con las autorizaciones de publicidad para los medicamentos sin receta son algunas de las cuestiones más importantes. Espero que el 4 de febrero marque un antes y un después para el mercado de los publicitarios en España ya que quedó claro que, a día de hoy, somos el vagón de cola europeo.
