| viernes, 11 de marzo de 2011 h |

La Teoría General de la Gravitación que Isaac Newton expuso en Philosophiae Naturalis Principia Mathematica, establece que la fuerza que ejerce una partícula puntual con masa m1 sobre otra con masa m2 es directamente proporcional al producto de las masas, e inversamente proporcional al cuadrado de la distancia que las separa. Sí, esa teoría que algunos dicen que surgió cuando se encontraba descansando debajo de un manzano y una manzana cayó al suelo, lo que le hizo reflexionar acerca de la fuerza que atraía a esa manzana hacia el suelo. La misma que mantenía a la Luna en la órbita de la Tierra.

A pesar de lo dudoso de la historia, que no de la Teoría General de la Gravitación de Newton, lo que está claro son las razones por las que la manzana cayó al suelo y no lo hizo hacia arriba. Igual de claro que el hecho de que quien está al final de una cadena termina sufriendo el chaparrón que le cae de encima. Ése es el caso de los farmacéuticos. Y no sólo nos referimos a todos esos descuentos y demás medidas adoptadas por los diferentes gobiernos que al final han terminado soportando sobre sus hombros. En esta ocasión se trata de lo que ocurre con el ‘cataloguiño’. Suspendido por el Tribunal Constitucional, los farmacéuticos lo han desactivado de sus sistemas electrónicos de dispensación. Eso sí, el Sergas no ha hecho lo propio todavía con los de prescripción. Así, si un médico quiere prescribir fuera del ‘cataloguiño’ lo debe hacer a mano. En fin, otra vez está claro quién se encuentra al final de la cadena.