Los farmacéuticos vascos pidieron dos meses de plazo, pero se activará el 6 de junio

En Castilla-La Mancha ya empiezan a notar los efectos del borrado de 31 moléculas

| 2011-05-06T16:12:00+02:00 h |

irene fernández

Madrid

Murcia, Castilla-La Mancha y, ahora, País Vasco. No ha pasado ni un mes desde que se desactivaran de los sistemas de prescripción electrónica de la comunidad manchega las marcas de 31 principios activos o se priorizaran los genéricos de cinco en la murciana, cuando el País Vasco ha anunciado que impulsará la prescripción de los genéricos de menor coste de ocho moléculas. Un paso autonómico más que vuelve a repercutir en los stockajes de las boticas y que pretende ahorrar en la factura farmacéutica de 2011 más de siete millones de euros.

Será a partir del próximo 6 de junio cuando se ponga en marcha la priorización en los vademécum vascos de los EFG de estos ocho principios activos (escitalopram, esomeprazol, fluvastatina, irbesartán, mirtazapina, valsartán, valsartán + hidroclorotiazida y venlafaxina), que se suman a los cuatro ya priorizados por la comunidad hace diez meses. Sin embargo, según el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Vizcaya, el tiempo con el que han sido avisadas las farmacias no es suficiente.

“La medida es una más y va en el sentido de todas las que se están tomando. Ponen las marcas al final del vademécum, para que el médico prescriba el genérico más barato primero, pero deberían habernos dejado más tiempo”, dijo Virginia Cortina, presidenta de los farmacéuticos vascos. Este colectivo pidió al departamento que dirige Rafael Bengoa el pasado 26 de abril un plazo de dos meses para adecuar los stocks, pero la consejería solamente concedió uno. Además, “hay tres principios activos (escitalopram, mirtazapina y venlafaxina) que afectan al sistema nervioso y que serán difíciles de cambiar al genérico”, indicó.

Ahora, tal y como reclamó Pedro Rivero, presidente del COF de Álava, “dado que el plazo de implantación por el Servicio Vasco de Salud es corto, será necesario optimizar la gestión del stock de las más de 800 farmacias vascas con la estrecha colaboración de los almacenes de distribución”.

Lo mismo sucedió en Castilla-La Mancha. Los boticarios tuvieron todavía menos tiempo de gestión. Y, aunque han transcurrido pocos días desde la última desactivación de las marcas de 23 moléculas el pasado 21 de abril, “en el almacén ya empieza a notarse” tímidamente, según aseguraron a EG farmacéuticos manchegos.

“El problema no es que se tomen medidas ni estamos en contra de que se tomen, sino que se debe hacer con un consenso, hay que contar con los profesionales farmacéuticos”, criticó, por su parte, Julián Creis, presidente en funciones del Consejo de Colegios Oficiales de Farmacéuticos de Castilla-La Mancha (Cofcam).

Más aún si se tiene en cuenta que en la región manchega hay tres cooperativas locales, de Talavera, Cuenca y Ciudad Real, cuyo ámbito de actuación es regional. “Dialogando se hacen mejor las cosas y por deferencia deberían habernos consultados. Cofares si no vende aquí lo puede hacer en otra comunidad, pero éstas tres no, y tienen una previsión de stockaje que ahora se queda ahí”, argumentó Creis.

En la misma línea opinó José Muñana, presidente de los boticarios de Guadalajara. Es cierto que, como confirmó, Cofares intentó minimizar el impacto de la medida al facilitar unos mecanismos de devolución de los productos que, en principio, no iban a tener salida. Pero, serán los propios usuarios los que al final tengan que reclamar su derecho. Porque, el problema no solamente afecta a los pacientes polimedicados, también a los que tienen problemas de disfagia, por ejemplo, que han visto que se cambiaba su medicación por formas no bucodispensables, según precisó Muñana.

Mayor rotación

La medida del borrado de 31 marcas en la comunidad manchega tuvo dos etapas. La primera afectó a ocho moléculas, que desaparecieron el pasado día 1 de abril con la excusa, según aseguró el jefe de Farmacia del Sescam (ver EG núm. 516), de que su rotación era mayor y no hacía falta esperar más tiempo.

Pero, tanto Creis como Muñana niegan que hubiera mayor rotación de estas moléculas. “Algunos tratamientos, como la ebastina, son para la alergia, y el Sescam pensó que si retrasaba su desactivación la medida dejaba de ser eficaz, porque la alergia es estacional”, afirmó Creis. Al fin y al cabo, estas propuestas, como dijo, “son como una gota más, se aguanta, pero no sé hasta cuándo”.