Los recortes aprobados en 2010 tendrán una gran repercusión negativa en la economía del sector a lo largo del nuevo ejercicio

Junto a una noticia positiva, la unificación de escalas, 2011 traerá una negativa, la pérdida de peso de la botica en la Ley de Salud Pública

| 2011-01-07T15:50:00+01:00 h |

REDACCIÓN

Madrid

La farmacia española ha dejado atrás uno de sus años más difíciles. Si desde 2000, sobre todo a raíz de la aprobación del RD 5/2000, su viabilidad económica ha sufrido continuos golpes, que han mermado progresivamente sus márgenes gananciales, fue en 2010 cuando saltaron todas las alarmas en el sector. Unas alarmas que emitieron un primer aviso el 26 de marzo, con la aprobación del Real Decreto Ley 4/2010, y que tuvo su continuación el 20 de mayo, cuando se dio luz verde al Real Decreto Ley 8/2010. Dos medidas legislativas que, según los cálculos realizados por el Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos, ha dejado en el alambre de la viabilidad económica la supervivencia de casi un tercio de las oficinas de farmacia españolas.

Sin embargo, a los efectos directos sobre la economía de las oficinas de farmacia de estas dos medidas legislativas se suman los retrasos en el pago de la receta farmacéutica por parte de muchas comunidades autónomas, algo que provoca que los diferentes colegios de farmacéuticos provinciales hayan tenido que solicitar préstamos para afrontar dichos pagos. ¿Y cuando se cierra el grifo del crédito? Renegociación de pagos, algo que repercute al resto de agentes de la cadena del medicamento.

Esta situación, a la que el próximo 1 de marzo se sumará la entrada en vigor en la oficina de farmacia de la nueva Orden de Precios de Referencia, necesita de “estabilidad y certidumbre” para poder ser revertida, tal y como aseguró recientemente la presidenta del Consejo General, Carmen Peña. A este respecto, en la máxima institución farmacéutica tienen claro que para lograr alcanzar la sostenibilidad del sistema las autoridades sanitarias deben apoyarse en la farmacia. “La farmacia es parte de la solución no del problema”, manifestó recientemente Peña.

Sin embargo, parece que el sector no es muy optimista de cara al nuevo año. Así, el presidente de la Federación Empresarial de Farmacéuticos Españoles (FEFE), Fernando Redondo, considera que las perspectivas de las oficinas de farmacia de cara a 2011 “van a ser mucho peores”. ¿Por qué? Porque, según ha señalado, las últimas medidas que se han propuesto desde el Ministerio de Sanidad “estrangulan la viabilidad económica de la farmacia y pone en riesgo la alta calidad del servicio prestado, algo que se hará patente durante este año”.

Con los augurios de Redondo coinciden los farmacéuticos andaluces. Así, un informe elaborado por el Consejo de Colegios Oficiales de Farmacéuticos de esta comunidad autónoma, Cacof, precisaba que los efectos de crisis y recortes golpearán con fuerza en 2011 a la oficina de farmacia. ¿En que se traducirá? En una caída de la facturación, en despidos de auxiliares y adjuntos, y en un aumento de la morosidad, que repercutirá en los mayoristas. Todo como consecuencia de los efectos de los RDL 4/2010 Y 8/2010 y la nueva Orden de Precios de Referencia.

A este respecto, cabe destacar, por ejemplo, que la patronal catalana de oficinas de farmacia, Fefac, presentó recientemente una denuncia ante la Comisión Europea por la limitación en los descuentos (un máximo del 5 por ciento en medicamentos financiados por el SNS, ampliable al 10 en el caso de los genéricos) por parte de los proveedores. Una nueva traba financiera que, según Fefac, “no afecta a las cuentas públicas, ya que quedan estrictamente en el ámbito privado”.

A estos obstáculos que perjudican la viabilidad de la oficina de farmacia se sumarían otros asuntos que todavía no se han resuelto y que, si se ha hecho, la solución no ha beneficiado los intereses económicos de la farmacia. Éste es el caso de, por ejemplo, el real decreto que regulará los márgenes de los productos sanitarios. Un proyecto que se quedó en el tintero el pasado ejercicio (no fue llevado al último Consejo Interterritorial) y que amplía la herida económica para boticas y distribuidores.

Sin embargo, a pesar de las dificultades que presentará en materia económica para las oficinas de farmacia el nuevo año, no todo serán malas noticias. Así, en 2011 verá la luz el real decreto que permitirá unificar las escalas de aportación del RD 5/2000 y del RD de mutuas, una reclamación ‘histórica’ de la farmacia española.

Pero, junto a la de cal previsiblemente vendrá una de arena. Y esta última parece que se puede concretar con la aprobación de la Ley de Salud Pública, cuyo proyecto se ‘comió’ dos artículos que situaban a la oficina de farmacia como referencia en la promoción de la salud y prevención, y en la que incluso se sugería el pago por servicios. En este sentido, el cobro por servicios de valor añadido, que era una de las vías de escape económicas de las boticas parece hoy por hoy, si no se evita en el trámite parlamentario, una utopía.