El resultado del piloto realizado en Suecia apuesta por su efectividad y su coste
Ager rechaza la RFID por su coste, aunque “tal vez dentro de diez años sea viable”
alberto cornejo
Estocolmo
La patronal europea de la industria farmacéutica (Efpia) ya dispone de datos para avalar su apuesta por Datamatrix como el sistema idóneo a implantar en la trazabilidad de los medicamentos en Europa y convertirse así en una de las más efectivas herramientas contra la falsificación de fármacos, en detrimento de otras opciones como la radiofrecuencia. Un aval que se refleja en los resultados preliminares de un pilotaje realizado en Suecia de este código bidimensional, que arrancó el pasado mes de septiembre en 25 farmacias de Estocolmo, que engloban 180 puntos de dispensación y a más de 200 farmacéuticos. Un pilotaje que aún se extenderá durante los próximos dos meses, y que fue presentado por el director general de la Efpia, Brian Ager, la pasada semana en la capital sueca.
Esas primeras valoraciones de la prueba, que enmarca la identificación y seguimiento de 25 fármacos distintos (110.000 packs) desde los laboratorios hasta la dispensación al paciente, pasando por la participación de dos distribuidoras, las suecas Tamro y Kronans Droghandel, han revelado que el Datamatrix “no ofrece problemas a las farmacias ni retrasos a los pacientes, es fácil de usar y, sobre todo, permite manejar buena cantidad de información y es el mejor sistema coste-efectivo”, tal y como señaló Stefan Carlsson, secretario general de Apoteket AB, la cadena sueca de la que forman parte las boticas participantes.
En lo puramente numérico, el sistema de codificación bidimensional ha permitido a las 25 boticas participantes la identificación y posterior dispensación de una media en torno al millar de envases de fármacos al día, unas dispensaciones en las que para su validación, es decir, la lectura del código bidimensional impreso, se ha empleado un tiempo inferior a un segundo en cada una de ellas. Sobre ello, cabe recordar que la ralentización del trabajo que a priori podría acarrear este sistema tanto a distribuidoras como farmacias era hasta ahora el principal argumento de sus detractores.
Coste-efectividad y plazos
Existen otras características de Datamatrix que, si bien no han sido objeto concreto de estudio en este pilotaje, son todavía recordadas por la Efpia como otros puntos fuertes complementarios a estos “prometedores” resultados, como así los calificó Ager.
En concreto, el director general de la Efpia recordó que “Datamatrix es el mejor sistema en relación coste-efectividad, mientras que la radiofrecuencia es aún muy cara”. Según las previsiones que maneja esta patronal, la impresión del código bidimensional apenas cuesta un céntimo de euro por envase, mientras que implantar un chip subiría los costes a 25 céntimos por unidad. “Los costes de la implantación de uno u otro sistema deben ser repartidos entre toda la cadena del medicamento, por lo que un sistema de bajo coste siempre será beneficioso para todos”, dijo Ager.
Por otra parte, la Efpia tampoco quiere dejar aparcado el debate que atañe a los plazos de implantación, puesto que “dentro de las posibilidades técnicas de aplicar hoy mismo la trazabilidad, sólo es posible Datamatrix”, recuerda. “Incluso, la RFID no es posible aplicarla a la logística de muchas compañías”, avisó Ager. No obstante, desde la Efpia se insiste en que su negativa a la RFID se debe, básicamente, a dicha inmediatez con la que se desea implantar la trazabilidad, puesto que “dentro de diez años puede que la RFID sea útil y viable, pero no ahora”, consideró su director general.
La mirada hacia España
Este pilotaje que ha puesto en marcha la patronal de la industria europea es casi coincidente en el tiempo con el que debe arrancar también de forma inminente en España. Pero entre ellas hay una diferencia: mientras que la Efpia sólo probó Datamatrix, las autoridades sanitarias españolas ha considerado oportuno dar cabida a los dos sistemas en su pilotaje. Una dualidad que desde la Efpia se valora “positivamente”, y que “hará que también estemos atentos a lo que determine esta observación”, adelantó Ager al tiempo que recordó que Italia y Bélgica también han mostrado interés por hacer sus propios análisis.
Respecto a la pregunta sobre si Datamatrix respondería también a una posible decisión de homogeneizar la trazabilidad en toda Europa, Ager indicó que “a pesar de ser un sistema aplicable en cualquier territorio, no tiene por qué implantarse en todos los países”. Y es que, para argumentar este rechazo a una posible unificación de criterios en Europa, vuelve a hablarse de costes y tecnología. “Cada país tiene su propio nivel tecnológico, así como la capacidad de decidir qué costes están dispuestos a asumir en función del nivel de seguridad que cada uno quiera”, resaltó el director general de la patronal europea.
Previsiones de futuro
Por otro lado, ya se conocen próximas fases de esta prueba. Una vez se acabe esta observación inicial en los primeros 25 locales, el piloto se extenderá a todas las boticas suecas, con vistas a obtener unos resultados más globales y presentar un informe fiable a la Comisión Europea con su propuesta para la lucha contra la falsificación de medicamentos. Un informe en el que se recordará que si bien la trazabilidad es una buena contribución en esta lucha “no vale como solución única, ya que debe acompañarse de otra serie de medidas”, sentenció Ager.