La caída del 7% sufrida en los meses de verano le llevó a marcar un mínimo anual

En la comparación interanual este valor acumula un retroceso del 1,5%

| 2011-08-26T16:12:00+02:00 h |

L. Díaz

Madrid

La evolución de la acción de Astellas se mantuvo bastante estable durante el primer semestre del año. Marcó un máximo en los primeros días de febrero cuando alcanzó los 3.280 yenes, si bien durante los meses de verano ha sufrido una caída del 7 por ciento, contagiado por el comportamiento bajista que ha imperado en los mercados, lo que le ha llevado a cotizar actualmente en su mínimo del año. Desde enero de 2011 este valor acumula una pérdida del 7,5 por ciento, en línea con la evolución media del sector, mientras que en la comparación interanual acumula un retroceso menor, del 1,5 por ciento.

Recientemente, Astellas publicó los resultados correspondientes al primer trimestre del ejercicio fiscal 2011, que cerró el pasado mes de junio. Las ventas ascendieron a 251.617 millones de yenes (2.270 millones de euros), un 6 por ciento más que en igual periodo del pasado año, crecimiento que recoge un impacto positivo por cambios en el perímetro de consolidación tras la adquisición a mediados del pasado año del grupo OSI Pharmaceuticals.

El resultado operativo fue de 48.801 millones de yenes (440 millones de euros), un 13,3 por ciento menos que el pasado ejercicio, mientras que el resultado neto ascendió a 25.146 millones de yenes (227 millones de euros), con un descenso interanual del 36 por ciento. Parte de esta caída responde al impacto de gastos no recurrentes en este ejercicio. En todo caso, las distintas líneas de la cuenta de resultados se vieron afectadas negativamente por un impacto negativo del tipo de cambio.

A nivel de productos, cabe destacar el buen comportamiento del fármaco Vesicare, destinado al tratamiento de problemas de incontinencia urinaria, y que ha mantenido un sólido ritmo de crecimiento. Mientras, por el lado negativo cabría mencionar Prograf, un inmunodepresor afectado por la creciente competencia de genéricos en el mercado americano, así como Harnal, fármaco destinado al tratamiento de tumores benignos de próstata.

Por mercados geográficos, Japón es con diferencia el primer mercado para este grupo farmacéutico, ya que aporta el 55 por ciento de los ingresos del grupo, con un incremento interanual del 2,1 por ciento. Estados Unidos aportó el 20 por ciento de las ventas y mostró un fuerte crecimiento interanual del 21,4 por ciento (36,7 por ciento depurado el impacto del tipo de cambio). Por su parte, Europa, con el 22 por ciento de las ventas, vio incrementar su facturación un 5 por ciento, mientras que el resto del mercado asiático, con un peso aún marginal en el total del grupo, aumentó su facturación en tan sólo un 1,6 por ciento.

A I+D destinó en el primer trimestre del ejercicio 43.531 millones de yenes (393 millones de euros), con un crecimiento interanual del 13 por ciento y un porcentaje sobre sus ingresos del 17,3, ratio considerablemente más elevado que la media del sector.

Por otro lado, en relación con su posible comportamiento en bolsa, se debe señalar que posiblemente éste va a venir determinado por el comportamiento de los mercados, ya que su cotización actual, por debajo de sus referencias medias de los últimos años, viene influenciada por la caída generalizada de los mercados y no por factores particulares de la compañía. De hecho, la evolución de su cuenta de resultados, con crecimientos generalizados de su actividad en los distintos mercados geográficos, se puede considerar positiva, al considerar que la caída del beneficio responde básicamente a factores exógenos.

En los dos últimos ejercicios, en contadas ocasiones se ha movido por debajo de los 3.000 yenes, al predominar una evolución entre 3.100 y 3.200 yenes, por lo que previsiblemente una recuperación de los mercados debería permitirle recuperar estas referencias.