L. DÍAZ
Madrid
La acción de UCB cotiza actualmente en la franja inferior de su rango de fluctuación del último año. Su comportamiento en este periodo presenta un primer cuatrimestre de marcado perfil bajista, en el que esta acción llegó a perder un tercio de su cotización. A continuación entró en una fase de desplazamiento horizontal, con cierta tendencia a la baja, pero caracterizada principalmente por una elevada volatilidad, llegando a marcar a finales de octubre su mínimo anual al tocar los 20 euros. En este mes de noviembre, UCB parece haber corregido esta línea de comportamiento y ha comenzado a recuperar posiciones, si bien sigue acumulando en el año una caída del 25 por ciento, el doble de lo que ha perdido el sector farmacéutico.
Sus resultados del primer semestre presentan unos ingresos de 1.691 millones de euros, un 11 por ciento inferiores a los de igual periodo del pasado año. No obstante, este importe se sitúa en línea con las estimaciones de los analistas. Detrás de este descenso se encuentra la fuerte caída de las ventas de unos de sus fármacos estrellas, Zyrtec (alergia), tras el vencimiento de su patente. Y es que sus ventas experimentan un descenso del 56 por ciento, hasta alcanzar los 132 millones de euros.
Los ingresos operativos, antes de intereses y amortizaciones, han ascendido a 358 millones de euros, un 26 por ciento por debajo de los del pasado año, mientras que el beneficio neto ha sido de 108 millones de euros, con un descenso interanual del 37 por ciento.
La caída del beneficio podría haber sido aún mayor, dada la debilidad mostrada por la línea de ingresos, de no haber sido por el buen comportamiento de los gastos, con descensos generalizados en sus diversas líneas, destacando una reducción del 14 por ciento en los gastos de marketing y comercialización. Este control de los gastos se ha logrado en gran medida por la rapidez en el proceso de integración de la compañía Schwarz Pharma, completado dos años por delante del calendario previsto, y que ha permitido a UCB materializar gran parte de las sinergias que se habían estimado en 380 millones de euros.
Tras la presentación de estos resultados UCB mantiene su previsión de cerrar el ejercicio 2008 con unos ingresos ligeramente superiores a los 3.300 millones de euros, mientras que el Ebitda podría alcanzar los 720 millones de euros.
Como hecho destacado reciente cabría mencionar el visto bueno por parte de la FDA a su fármaco Fesoterodina, destinado al tratamiento de la incontinencia urinaria. Se trata de un medicamento desarrollado por Schwarz Pharma y cuyos derechos de comercialización fueron adquiridos en 2006 por Pfizer. La próxima comercialización de este producto generará royalties significativos para UCB.
Otros avances en el desarrollo de nuevos fármacos o de nuevas aplicaciones para productos ya existentes han sido el lanzamiento el pasado mes de abril del fármaco Cimzia, destinado al tratamiento de la enfermedad de Crohn, así como la comercialización de dos nuevos productos para el tratamiento de la epilepsia, Vimpat y Xeppra XR.
Por otro lado, y en relación con su posible evolución en bolsa, se debe señalar que dado el fuerte castigo que ha sufrido este valor en el último año es previsible que su recorrido a la baja sea ya muy limitado. Además, el mercado ha descontado ya el fuerte impacto que tiene en sus cuentas el vencimiento de las patentes de Zyrtec y Keppra. La integración de Swhwarz, con la masa crítica que ello le aporta, así como los avances en la línea de I+D, especialmente centrados en las áreas de enfermedades del sistema nervioso central y del sistema inmunológico, deben contribuir a una mejor valoración de esta compañía por parte de los inversores.