| domingo, 30 de noviembre de 2008 h |

L.DÍAZ

Madrid

La acción de Pfizer cotiza actualmente cerca del límite inferior de su rango de variación del último año. Su comportamiento en este periodo ha sido netamente bajista, acumulando en el año una caída cercana al 25 por ciento, muy superior al descenso medio que experimenta el sector.

Sobre este particular se pueden distinguir en este periodo tres etapas claramente diferenciadas. La primera de ellas abarcaría el primer semestre y fue una fase de caída continuada. Entre los meses de julio y mediados de agosto, Pfizer estuvo recuperando posiciones, con lo que compensó parte de la elevada pérdida sufrida en la primera parte del año. Finalmente, los últimos tres meses han sido nuevamente un periodo de descenso significativo, acompañado este comportamiento de un elevado nivel de volatilidad

Los resultados del tercer trimestre muestran unas ventas cercanas a los 12.000 millones de dólares (9.500 millones de euros), una cifra similar a la lograda en igual periodo del pasado año. El beneficio del trimestre ha sido muy superior al obtenido el pasado año, 2.900 millones de dólares frente a 761 millones de dólares (2.300 y 600 millones de euros respectivamente), diferencia que se explicaría por las elevadas partidas extraordinarias contabilizadas el pasado año.

Como dato a destacar de estos resultados cabría mencionar el comportamiento de los gastos, que reflejan con total nitidez las medidas adoptadas por el grupo para mejorar sus niveles de eficiencia y rentabilidad.

Asimismo, se debe resaltar que las ventas del trimestre presentan mejor comportamiento en los mercados internacionales que en Estados Unidos, debido a que en este último Pfizer viene sufriendo con creciente intensidad el impacto de la competencia de genéricos, tras los recientes vencimientos de algunas patentes de su cartera de productos, entre las que se encuentran Zyrtec (alergia), Camptosar (cáncer) y Norvasc (hiperactividad), cuya facturación conjunta ha disminuido en el trimestre un 48 por ciento, hasta los 627 millones de dólares (495 millones de euros).

Por motivos diferentes también han presentado un ligero retroceso las ventas de su fármaco estrella Lipitor, primer producto a nivel mundial por volumen de ventas, destinado al tratamiento del colesterol. En este sentido, sus ventas en el trimestre han descendido un 1 por ciento, hasta los 3.100 millones de dólares (2.440 millones de euros), debido a la debilidad mostrada en el mercado norteamericano, donde bajan un 13 por ciento, debido a la política de algunas compañías aseguradoras de favorecer la utilización de un fármaco genérico parecido.

Pero no todo son malas noticias ya que, por el lado positivo, cabría mencionar algunos de los productos con mejor evolución en este último trimestre, entre los que se encontrarían Viagra, Geodon, Aricept y Celebrex. Aunque eso sí, tras la presentación de estos resultados, ha revisado ligeramente a la baja sus estimaciones de beneficios para el año en curso.

En relación con la posible evolución futura en bolsa de este valor, se debe señalar que los analistas anticipan una recuperación de Pfizer a corto y medio plazo, con un precio medio para un horizonte de 12 meses en torno a los 20 dólares, objetivo que implicaría en caso de ser alcanzado recuperar aproximadamente la mitad de la pérdida sufrida en 2008.

A pesar de esta recomendación general favorable respecto a Pfizer, algunos analistas muestran una visión un tanto más crítica, aduciendo que Pfizer ha puesto excesivo énfasis en las medidas de reducción de gastos y, sin embargo, no parece potenciar con la misma intensidad la compra de nuevos productos con los que ir reponiendo y enriqueciendo su actual cartera.