carmen m. lópez Madrid | lunes, 03 de marzo de 2014 h |

En un momento en el que la gestión clínica comienza a modelarse en cada servicio de salud, Galicia ha apostado por darle un impulso adicional.

El modelo propio que plantea el Sergas supone un proceso de rediseño organizativo cuyo objetivo es implicar al profesional sanitario en la gestión de los recursos utilizados en la práctica clínica, “organizando toda la actividad alrededor de procesos asistenciales basados en las mejores evidencias científicas”. Una cuestión que para la gerente del Servicio Gallego de Salud (Sergas), María Nieves Domínguez, no es nueva ya que desde el 2009 la gestión clínica constituye uno de los objetivos principales

La hoja de ruta del Servicio Gallego de Salud (Sergas) que fue firmada la semana pasada con el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, como testigo busca el desarrollo normativo que permita la implantación progresiva de unidades de gestión clínica “con responsabilidad y autonomía de gestión”, ha recalcado Domínguez a GM. La atención centrada en el paciente requiere del desarrollo de procesos asistenciales integrados, de la alta resolución y de la mejora de los procesos organizativos. Por ello, se crearán tres unidades por estructura de gestión integrada. La creación de equipos multidisciplinares, introdución de mecanismos de participación de los profesionales y formación de profesionales en herramientas de gestión serán claves en esta reformulación. Para ello, el Sergas propone “la firma de acuerdos de gestión entre las gerencias y las unidades de gestión clínica con inclusión de objetivos asistenciales, docencia, investigación de calidad, gestión y económicos”. Además de la adaptación de los sistemas de gestión por parte de las UGC y la elaboración de memorias. Si bien todo esto no es posible sin mejorar la comunicación dentro del sistema, como “herramienta imprescindible para transmitir y conocer la estrategia y los objetivos a alcanzar, así como lograr una interrelación óptima y necesaria entre los diferentes equipos de trabajo”.

Líneas estratégicas

Otra de las iniciativas que propone el Sergas es bajar hasta los 45 días, de los casi 50 actuales, la espera media para consultas y pruebas diagnósticas, al tiempo que se mejorará el cribado en urgencias con la extensión del 60 al 75 por ciento del sistema de Triaje Manchester, a fin de aumentar la seguridad del paciente.

Además, Sanidad elaborará una estrategia de atención a la cronicidad donde se llevarán las actuaciones de promoción de la salud desde Atención Primaria y se mejorará la atención de los polimedicados.

En cuanto a las nuevas tecnologías, el Sergas también está trabajando en ello, mediante las consultas telefónicas, que este último año han representado el 5,5 por ciento de las registradas en los centros de salud gallegos.

En definitiva, Domínguez ha resaltado que los objetivos estratégicos se agrupan en siete líneas básicas. La salud y demandas de los ciudadanos, a fin de promover la salud y responder a las necesidades de los pacientes; la calidad y seguridad; los profesionales, mediante una política personal alineada con las necesidades del sistema; información para facilitar la práctica clínica y la toma de decisiones; el sector sanitario como valor creador de crecimiento económico; la eficiencia y la modernización de infraestructuras sanitarias.

Una estrategia que parece que no calará demasiado bien entre los sindicatos, al menos en materia de gestión clínica ya que, tal y como nos advirtieron hace unas semanas (ver GM nº 499) de la desconfianza de la propuesta del gobierno gallego.