Joaquim Fausto Ferreira
Director general de Alliance Healthcare España
j. nieto
Madrid
El directo general de Alliance Healthcare en España, Joaquim Fausto Ferreira, reconoce que la situación actual es muy complicada para la distribución, aunque piensa que no es el momento de hacer una llamada al pánico. Eso sí, piensa que solamente habrá futuro para la distribución y las farmacias si demuestran que pueden ser sostenibles por sí mismas.
Pregunta. ¿En el nuevo escenario en el que se mueve el sector farmacéutico en general, en qué posición queda la distribución?
Respuesta. La distribución se queda en una posición muy complicada. Porque está en el medio de la cadena del medicamento y las actuaciones llevadas a cabo por el Gobierno el año pasado han afectado a toda la cadena, eso sí, con mayor incidencia a la oficina de farmacia, que tiene sus propios planes de recuperación. Han afectado a la industria farmacéutica, que también tiene sus propios planes de recuperación. Así que al final estamos en el medio, sometidos a una doble presión.
P. La distribución siempre ha estado en medio, ¿no?
R. Sí, es algo natural, por eso en mis comentarios no hay ni pánico ni pesimismo, simplemente es realismo.
P. ¿En esta situación también influye la propia estructura de la distribución en nuestro país?
R. Sí. La forma estructural de la distribución impide tomar decisiones, reaccionar, reformular y reformar para adoptar una línea de eficiencia. Está todo tan compartimentado que al final todos quedamos por igual, es la eterna discusión. Se ha discutido sobre muchas cosas pero no se han cambiado, y hasta ahora el mercado lo podía soportar.
P. También es habitual en los últimos tiempos hablar de sostenibilidad, ¿en qué debe consistir ésta para la distribución?
R. Bueno, creo que básicamente para salir de esta situación la distribución y la farmacia, que en este país es innegable que en España ambas están muy vinculadas, yo diría integradas, por ser casi el 80 por ciento de la distribución de carácter cooperativo, deben ser sostenibles per se. Solamente así habrá futuro para las dos.
P. ¿Que cada una siga su propio camino?
R. Lo que creo es que cuanto más se defienda la integración entre farmacia y distribución, que tampoco tengo nada en contra de esta situación, habrá un momento en el que los decisores piensen que está todo unido y diga que su margen, el de ambos unido, es demasiado alto. Siempre he defendido que la distribución tiene que aparecer per se, no como un subproducto de la farmacia. Y eso no va en contra de la farmacia, porque soy farmacéutico y copropietario de una farmacia en Portugal.
P. ¿Juntos pero no revueltos?
R. La farmacia tiene una función sanitaria muy importante pero puede ser un problema muy complejo seguir la lógica de que cuando se habla de distribución se hable siempre de oficina de farmacia. Llegará un momento en el que no se conseguirá demostrar el valor que cada una de ellas tienen para la sociedad de per se.
P. ¿Qué pasaría si se llegase a ese extremo?
R. Pues que la gente no lo pagaría, porque considerarán que la suma de los márgenes de ambos agentes es demasiado. Una actuación para sacar adelante la distribución es demostrar su valor, no a la farmacia sino a la sociedad, para que las condiciones remuneratorias actuales cambien.
P. La industria ya ha hablado de reinvención. La distribución también deberá reinventarse, ¿no?
R. Sí, necesitamos hablar de esto, la distribución por su lado y la farmacia por el suyo. Creo que cuanto más fuerte sea la distribución más fuerte será la farmacia.
P. En este punto deberán influir el cambio en el modelo retributivo, las fusiones y adquisiciones… ¿Son dos medidas correctas para afrontar el futuro?
R. Sí. A todos nos gusta hablar del cambio en el modelo retributivo para que la retribución de la distribución y la farmacia sean cada vez menos dependientes del precio del medicamento. Pero debe haber situaciones en las que se dependan del margen y otras que dependan del volumen. Un modelo mixto. Tampoco hay que olvidar que el regulador es el que paga, y finalmente seremos todos presionados por él. Es decir, que si se fija un precio por unidad después bajará ese precio.
P. Regulación.
R. Cuando las cosas iban bien nadie quería cambiar el modelo regulatorio, pero ahora que van mal todo el mundo lo quiere cambiar, pero dependemos de una economía global, no estamos solos en el mercado.
P. Otra vía de escape sería aumentar y mejorar los servicios adicionales a la labor logística de la distribución, ¿no?
P. Sí, todo está en una dinámica de mercado en la que la economía está deprimida, veo a los farmacéuticos muy deprimidos… Tenemos todos que darnos la mano y avanzar.
P. En este sentido Alliance parece que ya adaptó hace tiempo a este nuevos escenario. ¿Puede que se deba a su orientación internacional?
P. Sí, somos un grupo que tenemos contacto con todas las farmacias internacionales y sabemos cuáles son las tendencias. Antes de llegar a España ya había habido recortes brutales en Italia, Holanda o Francia.