Josep Esteve

Presidente de la Federación de Asociaciones de Farmacias de Cataluña (Fefac)

| 2011-10-14T16:20:00+02:00 h |

j. Nieto

Barcelona

En uno de los momentos más difíciles de su historia para las oficinas de farmacia catalanas Josep Esteve ha asumido la presidencia de la patronal catalana de oficinas de farmacia, Fefac, en sustitución de Xavier Tarradas. Esteve analiza para EG la situación que atraviesa este colectivo ante los problemas que general el retraso en el pago de la factura farmacéutica.

Pregunta. Accede a presidir Fefac en un mal momento, ¿no?

Respuesta. Sí, un momento crítico, pero estamos cogiendo las riendas y nos estamos situando en primera línea de fuego.

P. ¿Con qué disparan?

R. Hacemos gestiones junto al Consejo Catalán para defender los intereses del colectivo y para que el Departamento de Salud escuche nuestras reivindicaciones.

P. ¿Ya hay farmacias al límite?

R. Hay farmacias que están en suspensión de pagos. Por eso es importante realizar una operación económica de aval bancario para hacer frente a los retrasos junto a la corporación, porque el crédito es colectivo. Si no, muchas farmacias tendrán graves problemas de tesorería. Con el paraguas del colectivo pueden ejercer, si no, cuesta más que te den crédito.

P. Con esta situación es fácil saber cuáles son sus objetivos.

R. Sí, intentar defender al máximo al colectivo y buscar las mejores condiciones.

P. Dice que es necesario el “diálogo permanente”. ¿Hay que pasar de las palabras a los hechos?

R. Estamos preparados para ello. Hemos tenido reuniones con el Consejo Catalán para preparar una campaña informativa conjunta que se presentará esta semana.

P. ¿En qué consistirá?

R. Se enmarca en una serie de acciones que vamos a emprender para informar a la sociedad y a los farmacéuticos. Si bajamos un poco la comunicación, la presión administrativa se dispara

P. ¿Se plantea adoptar otro tipo de medidas de presión?

R. No, hay que presionar pero sin reventar. Empezaremos con una campaña, “La farmacia enciende la luz roja”, y a esta le seguirán una serie de acciones más o menos intensas en función del resultado de las negociaciones.

P. ¿Dónde se encuentra el límite para que la cosa no reviente?

R. Por ejemplo se puede hacer una campaña de cartelería en las farmacias para informar al usuario de que si no hay financiación no podremos cumplir con nuestro trabajo, No tendremos la confianza con los proveedores ni liquidez para cubrir sus necesidades.

P. Fefac reclamó la creación de una mesa de crisis. ¿Han recibido alguna respuesta a esa petición?

R. Ninguna. Eso sí, mucha gente ha solicitado que se pague la prestación farmacéutica. Es algo muy positivo. Ahora tenemos que implicar a los diferentes agentes sociales, empresarios, sindicatos y usuarios, para que nos apoyen.

P. ¿La comunicación con el Consejo General es fluida?

R. Sí, totalmente.

P. Pero en el tema de los impagos Fefac tiene mucho que decir.

R. Por supuesto. Damos nuestros pasos y hacemos nuestras reivindicaciones y acciones, pero el que negoció el convenio y el que tiene la última palabra es el Consejo Catalán. Estamos a su lado en todo lo que sea asumible, y hasta ahora hacen todo lo posible y nos informan al momento.

P. Visto lo visto, ¿qué futuro prevé a corto y medio plazo para la oficina de farmacia?

R. El futuro es impredecible pero lo veo complicado. Eso sí, pienso que subsistiremos. Nos tendremos que apretar otra vez el cinturón. Habrá que plantearse inversiones que antes se hacían porque ya no habrá liquidez y será más complicado. Tendremos que trabajar más por el mismo dinero o cobrar menos y trabajar más, algo que también habrá que reflejarlo necesariamente en el convenio colectivo.

P. ¿Se pueden hacer nuevos agujeros a ese cinturón?

R. Habrá que buscar servicios complementarios que no sean exclusivamente el medicamento, como la óptica, la ortopedia o la dietética. Nuevos caminos, ser proactivo en la actividad, lo de estar tranquilo en casa se acabó.

P. Caminos remunerados, ¿no?

R. Hablar de carteras de servicios sin remunerar no es sostenible. No puede haber acuerdos con declaración de intenciones pero sin partida presupuestaria.

P. Además del tema económico ahí otras reivindicaciones de Fefac en estos momento, ¿no?

R. Sí, por ejemplo, pedimos un margen oficial para efectos y accesorios financiados. También queremos que se pacte el precio de los dietoterapéuticos, porque es distinto en cada autonomía. Respecto a la tarjeta sanitaria y la receta electrónica, con todo lo que ha llevado de gestión y programación, se ha tirado mucho dinero para montar estructuras diferentes y que ahora no son compatibles. Un caos. Creo que los problemas de interoperatividad se deben a un exceso de personalismo político.

P. ¿Qué destaca del trabajo realizado por su antecesor?

P. Ha hecho una gran labor de posicionamiento de Fefac, a un buen camino de consenso con los colegios y la administración.

P. ¿Seguirá el mismo camino?

P. Intentaremos estar a la altura.

P. Y ese consenso del que hablaba, ¿se producirá con FEFE?

R. Difícil, tenemos criterios y estrategias distintas en algunas cosas, aunque dentro de la discrepancia tenemos un interés común.