A3Media viernes, 01 de abril de 2016 h
Resulta como siempre muy interesante el trabajo transversal que viene realizando Farmanova en el ámbito de la Oficina de Farmacia en su mancha geográfica que pone luces a la educación sanitaria de los pacientes por medio de esas guías ilustradas sobre patologías determinadas.
Aprendimos mucho con la Fibromialgia y ahora nos toca el Parkinson. Ya saben, esa enfermedad neurodegenerativa del sistema nervioso central cuya principal característica es la muerte progresiva de neuronas en una parte del cerebro.
La consecuencia más importante de esta pérdida neuronal es una marcada disminución en la disponibilidad cerebral de dopamina, principal sustancia sintetizada por estas neuronas.
Esta enfermedad suele presentarse a partir de los sesenta años, aumentando progresivamente hasta los ochenta años. La incidencia entre estas edades es de 1-2 cada mil personas afectadas.
Sin embargo, existen casos a edad más tempranas, un 5-10 por ciento de los pacientes tiene menos de 40 años, incluso existen casos juveniles de aparición desde la segunda década de la vida.
Pues bien, la entidad que homologa la distribución en Andalucía, Extremadura, Baleares y Canarias que preside Antonio Mingorance continúa en esa línea de penetración en el tejido social para educar y formar a los pacientes a fin de que no caigan en los errores más habituales entendiendo siempre que el Parkinson cursa en muchas ocasiones con ciertas comorbilidades que le llevan a los enfermos a utilizar multitud de productos dada la cronicidad del proceso, su larga evolución y su curso progresivo. Me parece, por tanto, un gran trabajo el de intentar poner orden en este ámbito de los procesos neurodegenerativos que no consisten exclusivamente en tratar de compensar el contenido de la dopamina y la alteración de su concentración y su acción en el núcleo estriado lo que causa descoordinación de los movimientos, porque aunque eso sea cierto no es lo único en nuestro deber de intentar entender a ese tipo de pacientes en su conjunto.
Así pues el trabajo de Ana Rodríguez Fernández y Macarena Toral Iranzo, y al asesoramiento y revisión de los doctores Francisco Escamilla Sevilla y Carlos J. Madrid Navarro, neurólogos del Hospital Virgen de las Nieves, se espera con renovadas ilusiones por las asociaciones de pacientes, boticarios y profesionales que han encontrado en estas guías un buen medio para la relación médico-paciente.
Los directivos Jesús Porres e Ignacio Pérez Ortiz han trabajado duro para que dar luz a este proyecto.
El decálogo tendrá en cuenta la depresión y la ansiedad, que son muy frecuentes en la enfermedad de Párkinson desde etapas tempranas, llegando incluso a preceder en una década a la sintomatología motora.
También las alteraciones del sueño, el estreñimiento u otros síntomas no motores como son la pérdida de olfato, la seborrea, la sudoración excesiva, la hipotensión ortostática y los trastornos cognitivos.
Estos y otros muchos factores como la dieta o los inherentes al tratamiento han sido meticulosamente estudiados para que la oficina de farmacia sea en esta patología neurológica un centro para la salud que aporte un enorme valor a la sostenibilidad del Sistema Nacional de Salud. Seguro.
El Parkinson suele presentarse a partir de los 70 años y aumenta progresivamente hasta los 80; la incidencia entre estas edades es de 1-2 cada mil personas afectadas