L. Díaz Madrid | viernes, 24 de octubre de 2014 h |

La acción de Almirall cotiza actualmente a 11,6 euros, situándose en una zona intermedia dentro de su rango de variación del último año. Analizando su gráfica de este periodo se observa un perfil relativamente plano, aunque con un movimiento alcista a finales de pasado año, marcando en enero su máximo anual. A partir de ahí inició un suave retroceso que se extendió hasta el mes de julio. En los tres últimos meses Almirall ha vuelto a mostrar signos de recuperación.

Este último repunte recoge en parte el impacto favorable del informe emitido por las autoridades sanitarias de la UE para el uso combinado de dos fármacos de Almirall en el tratamiento de la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC). Concretamente, se trata de aclidinio y formoterol, combinación incluida en el acuerdo alcanzado entre Almirall y AstraZeneca, en una operación que dice mucho de la apuesta estratégica de la española por el área de dermatología. Como comunicaron las partes, la transacción está valorada inicialmente en unos 850 millones de dólares, aunque el montante final que podría llegar a alcanzar hasta 2.100 millones de dólares, dependiendo del cumplimiento de una serie de hitos.

Los últimos resultados publicados por el grupo son del cierre del primer semestre. En ellos cabe destacar el fuerte crecimiento de las ventas (90 por ciento del total de los ingresos del grupo) que experimentaron un crecimiento interanual del 17,4 por ciento, mientras que el Ebitda (beneficio antes de depreciaciones, amortizaciones, cargas financieras y fiscales) se incrementó en casi un 50 por ciento. Por su parte el beneficio neto del semestre ascendió a 19 millones de euros, un 8,5 por ciento superior al de igual periodo del año anterior.

Crecimiento de los ingresos

Los ingresos de este primer semestre fueron de 433 millones de euros con un crecimiento interanual del 5,6 por ciento. Este crecimiento se sustentó principalmente en el buen comportamiento de las líneas de enfermedades respiratorias y dermatología, con crecimientos del 14 y del 64 por ciento respectivamente; se estima que estas dos franquicias llegarán a generar, respectivamente, el 30 por ciento de los ingresos del grupo.

El crecimiento de las ventas ha ido paralelo a una sensible mejora del ratio de margen bruto que se incrementó en casi 4 puntos porcentuales hasta rozar el 70 por ciento.

En lo que respecta a la inversión en I+D, Almirall destinó en el primer semestre 54 millones de euros, cifra similar a la del ejercicio anterior y que supone un porcentaje sobre las ventas del 13,4 por ciento, ligeramente por encima de la media del sector.

Por último, cabe señalar que Almirall cerró el primer semestre del año con una situación financiera muy desahogada, destacando una deuda financiera de 319 millones de euros, una posición de liquidez de 88 millones de euros y un patrimonio neto equivalente al 50 por ciento del pasivo del grupo.