Aumenta la capacidad de decisión del farmacéutico de dispensar un fármaco

Los expertos creen que la relación con el resto de los agentes de la cadena cambiará

| 2011-10-14T16:18:00+02:00 h |

J. N.

Madrid

La entrada en vigor el próximo 1 de noviembre del Real Decreto-ley 9/2011 introduce, como consecuencia de la modificación del artículo 85 de la Ley de Garantías, tras aprobarse el RDL 9/2011, aspectos que darán un mayor margen de maniobra al farmacéutico a la hora de gestionar su negocio. El RDL recoge que el farmacéutico dispensará la presentación del medicamento de menor precio, de acuerdo con las agrupaciones homogéneas fijadas por la Dirección General de Farmacia del Ministerio de Sanidad, pero las excepciones hacen que los boticarios puedan tener una mayor capacidad de decisión a la hora de elegir el medicamento que dispensan.

Estas excepciones se producirán cuando en la prescripción, indicación o autorización de dispensación se identifique el fármaco por su denominación comercial. Ahí el boticario lo dispensará “si es el de menor precio de la correspondiente agrupación, y si no lo fuera dispensará el que tenga menor precio de la misma”. ¿Qué significa? Que podrá elegir, siempre a precio menor, la presentación de ese principio activo, incluso la marca. Una situación con la que podrá afinar más a la hora de comprar, de manejar los stocks o de tener otra posición en sus relaciones comerciales con distribuidores y laboratorios. Es decir, incrementar su papel como gestor.

A este respecto, Luis de la Fuente, director gerente de Mediformplus, consultoría de marketing para farmacias, está convencido de que el rol que ahora toma el farmacéutico “es determinante a la hora de seleccionar el producto que va dispensar”, algo que puede resultar muy beneficioso para tratar de recomponer la maltrecha economía de la oficina de farmacia. Eso sí, todo dependerá de cómo integre cada autonomía el RDL. “La planificación en dispensación, compras y almacén definirá que la medida sea perjudicial para la farmacia, al reducir la facturación, o positiva, por la rentabilidad que pueden sacar en su gestión”, asegura.

Sobre este aspecto, De la Fuente cree que “si el boticario hace bien los deberes invertirá menos tiempo en gestión de compras, por la selección y reducción que debe hacer de proveedores; disminuirá el surtido, aumentando las vueltas al stock; reducirá tiempo en recepción de pedidos; y, si se gana el afecto de sus proveedores estratégicos, compensará parcialmente la reducción de la facturación por un aumento de beneficio”.

Con De la Fuente coincide Rafael Borrás, director del área de Bioindustrias y Farmacia en Antares Consulting, que considera que con el RDL 9/2011 se “da más protagonismo al boticario y, por ello, su capacidad de gestión será clave”. Sobre este particular, Borrás piensa que esta mayor capacidad de gestión que le concede el nuevo marco legal tendrá su aplicación, por ejemplo, en los stock. “El stock será menor y primarán las fórmulas que se ofrezcan desde el binomio distribución-laboratorio”.

Nuevas relaciones

Precisamente, respecto a estas nuevas fórmulas y cambios en las relaciones entre los distintos agentes de la cadena del medicamento, los expertos consideran que al farmacéutico se le abre una nueva puerta para tener una posición más relevante en sus relaciones comerciales, por ejemplo, con los laboratorios. Así lo cree Borrás, que dice que “muchos laboratorios tendrán que cambiar su relación con el farmacéutico, y a algunos les costará porque no es el stockholder con el que estaban acostumbrados a trabajar”.

¿Y con la distribución? A este agente de la cadena le interesa, y mucho, que la farmacia cuente con una mayor capacidad de gestión y con una vía para afrontar el futuro con mayores garantías. Y sobre todo, dentro de un modelo mayoritariamente cooperativo.

A este respecto, destaca, por ejemplo, la herramienta que Cofares ha puesto a disposición del farmacéutico: Opción Prestigio, un servicio para que el boticario “aproveche el RDL 9/2011”. Se trata de una opción que se les da a los farmacéuticos para favorecerse de los acuerdos alcanzados por Cofares con “laboratorios de marcas fuertes” y comprar a un mejor precio. De momento, este acuerdo afecta a cerca de 210 referencias.