Lamentan que no se llevase al Interterritorial y que los fabricantes les suministren los productos sanitarios a precios anteriores al RDL 8/2010

Los farmacéuticos consideran que en un sector regulado, como es el del medicamento, “se tiene que regular desde principio a final”

| 2010-12-10T17:12:00+01:00 h |

redacción

Madrid

La reducción de un 7,5 por ciento en el precio de venta al público (PVP) de los productos sanitarios incluidos en la prestación farmacéutica del SNS que establecía el artículo 11 del RDL 8/2010 se ha convertido en una fuga de agua en el barco de la viabilidad económica de las oficinas de farmacia. Y es que, este artículo solo incide en la reducción del PVP de estos productos (a excepción de los absorbentes, cuya reducción se fijó en el 20 por ciento), y deja abierta la incógnita de cómo se deben repartir los agentes del sector las pérdidas derivadas de la aplicación de este descuento.

Tanto desde el sector de la distribución de medicamentos como desde la oficina de farmacia se ha denunciado que los fabricantes les facilitan estos productos “al mismo precio” que lo hacía antes de aprobarse el RDL. Esta circunstancia se podría haber solucionado con la aprobación de un real decreto que regulase los márgenes comerciales de estos productos incluidos en la prestación farmacéutica, pese a ello, el ministerio de Leire Pajín no llevó el tema al Interterritorial celebrado el pasado 9 de diciembre.

Esta circunstancia ha vuelto a levantar ampollas entre dos agentes de la cadena del medicamento que se dicen perjudicados por el “vacío” que rodea a este asunto: distribuidores y boticarios. A este respecto, ambos colectivos coinciden en considerar que el retraso en la aprobación de este real decreto perpetúa una “situación complicada” para ambos.

A este respecto, el presidente de la patronal de oficinas de farmacia FEFE, Fernando Redondo, se quejó de que el proyecto se podía haber llevado al Interterritorial. “Era sentarnos a todos los agentes y llegar a un acuerdo para fijar los márgenes”, manifestó. Para él, a pesar de comprender la posición de los fabricantes, no entiende que tengan que hacer cargo de la totalidad de los descuentos “a los que nos obliga la Administración”. Y es que, según señala, “se ha pasado de que los productos sanitarios tuviesen un margen mayor que los medicamentos a tener que dispensar a pérdidas”.

Sin embargo, Redondo afirmó no estar sorprendido por esta situación. “No nos sorprende la postura de la Administración, pero no puede ser que en un sector regulado no se regule nada más que el final. Se debe regular de principio a fin”, indicó.

En este sentido, Francesc Escobar, secretario de la patronal Fefac, afirmó no estar de acuerdo con regular situaciones de este tipo a golpe de decreto. “Cualquier norma que regule los márgenes y precios debería ser pactada con el sector. En ningún caso el nuevo decreto puede ahogar más a las farmacias y cargar nuevamente sobre su espalda la búsqueda del ahorro, que es lo que hace últimamente el Gobierno con las medidas de recorte”, indicó.

Por su parte, fuentes de la patronal de la distribución, Fedifar, estimaron que era “una mala noticia” que no se haya dado el primer paso para sacar el real decreto de márgenes y afirmaron que constataban que los fabricantes de productos sanitarios “no han bajado los precios de acuerdo con el RDL 8/2010”, por lo que “para ellos no tiene efecto alguno la medida que, como en el caso de los medicamentos, debería afectar proporcionalmente a los tres agentes de la cadena de suministro”.

Para Fedifar “no tiene sentido que una bajada en el PVP de los productos farmacéuticos no tenga reflejo en el precio de venta del fabricante”. Por ello, consideraron que es necesario contar, “cuanto antes”, con una regulación que determine las cuantías a percibir por el fabricante, el mayorista y la farmacia.