| domingo, 02 de noviembre de 2008 h |

L. DÍAZ

Madrid

Se cerró una semana de marcado perfil bajista, con 20 valores de la muestra en pérdidas frente a tan sólo cuatro que consiguieron finalizar en positivo. Fue, además, una semana marcada por una elevada volatilidad, manteniendo el perfil que venía presentando desde principios de septiembre. Los movimientos más destacados fueron, por el lado bajista, los fuertes recortes que sufrieron Elan Corporation y Faes. Mientras, por el lado alcista cabe reseñar el buen comportamiento experimentado por Bristol Myers-Squibb (BMS), que acabó con una subida del 11 por ciento. Estos movimientos manifiestan que el Índice Global sufre una fuerte corrección, con una caída de un 4 por ciento, mientras que en el acumulado del año baja ya un 15 por ciento.

En el análisis particular de algunos valores, es preciso señalar que BMS rebotó con fuerza al alza tras haber marcado a principios de octubre su mínimo de los últimos diez años. La evolución de este valor en el presente ejercicio venía siendo claramente negativa, si bien en los meses de verano parecía que conseguía estabilizarse. Esta situación cambió bruscamente y, desde mediados del pasado mes de septiembre, comenzó a caer con rapidez, situación que se intensificó en las primeras semanas de octubre. A pesar de la recuperación de estos últimos días, BMS sigue cotizando con un fuerte descuento, más del 25 por ciento, en relación con su precio de comienzos de año.

Por su parte, Faes fue uno de los valores más castigados de la semana con una caída del 21 por ciento, que le llevó a marcar un nuevo mínimo de los últimos años. Desde enero este valor acumula una caída superior al 50 por ciento, mientras que en la comparación interanual ha perdido dos terceras partes de su valor en bolsa.

Otro valor en negativo fue Elan Corporation, que sufrió la segunda mayor caída de la semana con una bajada de un 19 por ciento. El comportamiento de Elan en el presente ejercicio mostró una evolución alcista hasta el pasado mes de julio, momento en el que marcó su máximo de los últimos años. Pero tras las dificultades que surgieron en torno a uno de sus principales fármacos, la acción de esta compañía se derrumbó, perdiendo en los cuatro últimos meses un 75 por ciento de su valor en bolsa.

La semana pasada la caída se ha acentuó, si bien, y como dato esperanzador, cabe mencionar que en la última sesión Elan rompió esta línea de bajada y cerró con un ligero repunte. Los analistas pronostican para el corto-medio plazo cierta recuperación de este valor, si bien muy lejos de los niveles en los que se venía moviendo antes del derrumbe de julio.

Asimismo, Bayer volvió a cerrar otra semana negativa, cediendo un 9 por ciento, lo que le llevó a marcar su mínimo de los últimos años. De esta manera, continúa dentro de la tendencia que inició a principios de septiembre y que le ha llevado a perder en el último mes y medio un 25 por ciento de su valor. Al igual que en el caso anterior, en la última sesión Bayer rebotó con fuerza al alza y recuperó parte de la pérdida. En todo caso, lo más significativo de la evolución que viene mostrando este valor desde finales de verano es su elevada volatilidad, con oscilaciones muy pronunciadas en uno y otro sentido.

Merck & Co. también cerró la semana con una bajada de un 8 por ciento, manteniendo la línea bajista que ha mostrado durante todo el último año y que le ha llevado a acumular una pérdida en el año de más de un 50 por ciento de su valor en bolsa. La intensidad del descenso de estos últimos días se explica por la fuerte volatilidad que ha acompañado a este valor en las últimas semanas y que puede ser un indicio de un próximo cambio de tendencia. Los analistas anticipan una recuperación de Merck & Co. en los próximos meses, que le llevaría a situarse en torno a los 40 dólares.