| martes, 26 de febrero de 2013 h |

La Comisión de Empleo y Seguridad Social del Congreso ha aprobado una proposición no de ley del PP, con el apoyo de CiU y UPyD, la abstención del PSOE y la oposición de Izquierda Plural (IU-ICV-CHA), en la que se insta al Gobierno a tomar medidas para asegurarse de que los turistas europeos que visitan España paguen por la asistencia sanitaria que reciben mientras que están en el país. La iniciativa pide al Gobierno “adoptar las medidas que sean necesarias de coordinación, en aras a lograr que toda prestación sanitaria dispensada a asegurados procedentes de otros Estados durante su estancia temporal en España sea facturada y reembolsado su coste, con arreglo a lo previsto en los Reglamentos Comunitarios y Convenios Internacionales que, en cada caso, resulten de aplicación”.

El portavoz del PP en la comisión, Rubén Moreno, ha argumentado, citando un informe del Tribunal de Cuentas, que existe “un porcentaje significativo de ciudadanos de países limítrofes que residen en su país de origen y hacen uso de la tarjeta sanitaria en España cuando les conviene”, lo que ha supuesto un coste añadido para el país de más de 450 millones de euros anuales. En este sentido, el Grupo Popular ha denunciado que los Servicios de Salud “apenas facturan” las prestaciones farmacéuticas dispensadas a asegurados procedentes de otros Estados en estancia temporal en España, así como los servicios de urgencia que tampoco son objeto de facturación. Igualmente, ha afirmado que las tarifas aplicadas por los diferentes Servicios de Salud no son “homogéneas ni se encuentran adecuadamente actualizadas”.

Así, el grupo ha señalado que durante los últimos cinco años (2007-2011) mientras que el número de turistas que recibe España representa 4,5 veces más que los turistas que salen al extranjero, por el contrario la facturación emitida tan solo dobla la recibida, lo que, a su juicio, “pone de manifiesto una clara infrafacturación que deriva, tanto de la aplicación de unas tarifas reducidas o desactualizadas, como del hecho de que probablemente no se facture toda asistencia sanitaria que se dispensa a asegurados extranjeros”. Mientras, la diputada socialista Esperança Esteve ha criticado que en la iniciativa se “mezclan inmigrantes regulares que han trabajado y cotizado y ahora sufren las condiciones de la crisis” con los turistas europeos. Además, ha recordado que el turismo extranjero que reside temporalmente en España aporta un “beneficio considerable”, de unos 600 millones de euros netos, aunque ha reconocido que existe un problema en el turismo puntual.