| domingo, 18 de enero de 2009 h |

Carlos Arganda

Madrid

Pregunta. ¿En qué situación se encuentra el pipeline oncológico de Roche?

Respuesta. Casi un tercio del esfuerzo inversor en I+D se centra en el desarrollo de medicamentos contra el cáncer. A nivel mundial, Roche destina cada año más de 2.000 millones de francos suizos a la investigación sobre el cáncer. Es obvio que nuestro pipeline denota una apuesta clara por el desarrollo de terapias biológicas innovadoras. Estamos viendo que estos medicamentos biotecnológicos están empezando a cambiar paradigmas en el manejo del cáncer y su uso en realidad no ha hecho más que empezar. Por ejemplo, Avastin, ha seguido demostrando beneficios en más de cinco tipos de tumores a lo largo de los últimos dos años. De hecho, es protagonista de uno de los programas de desarrollo clínico más ambiciosos de la historia de la oncología: más de 40.000 pacientes participan actualmente en 130 ensayos clínicos que abarcan un total de 15 tipos distintos de cáncer.

P. ¿Qué productos en desarrollo son los más prometedores?

R. En las fases iniciales de investigación estamos desarrollando en Roche varias moléculas que presentan perspectivas muy prometedoras para los pacientes con cáncer. Es el caso del T-DM1 para el cáncer de mama HER2 positivo. Este medicamento es un conjugado de Herceptin con DM1, que es un agente antimicrotúbulos. En fases más avanzadas se encuentra pertuzumab, también un anticuerpo monoclonal humanizado, para el tratamiento del cáncer de mama HER2 positivo. Para tumores como el de pulmón o melanoma, trabajamos en el desarrollo del CKI-27, en fase I, que será el primer inhibidor dual y muy selectivo de la vía de señalización Map-K, lo que supondrá una nueva forma de combatir el cáncer. También en fases iniciales hay tres anticuerpos monoclonales, huMAb IGF-1R, GA101 y GA201, que tendrán indicación en una amplia gama de tumores.

P. A principios de 2008 tuvo lugar una inversión en las plantas de Alemania y Suiza para la producción de biofármacos, sobre todo en oncología, ¿cuándo se empezarán a ver los frutos de estas inversiones?

R. Las inversiones se centran en una gran variedad de proyectos, desde la construcción de un nuevo edificio a la renovación de otros o a la dotación de nuevos equipamientos. Por ejemplo, en nuestra sede central en Basilea se están haciendo muchas inversiones, de modo que en el futuro podremos contar con un nuevo edificio para I+D. Roche continuará con nuevas inversiones que son una muestra más de nuestro compromiso con la investigación.

P. ¿Qué importancia tiene la medicina individualizada en oncología?

R. Roche apuesta claramente por la medicina individualizada, tanto a nivel global como en el caso de nuestra afiliada en España. Como ejemplos palpables y disponibles ya para los pacientes, podemos citar dos de nuestros fármacos. En el cáncer de mama HER2 positivo, gracias al uso de Herceptin, podemos hablar de una realidad que ha supuesto un cambio sustancial en el manejo de este tipo de tumor. Por otra parte, los linfomas también se han beneficiado de estos nuevos tratamientos biológicos. De hecho, Mabthera ha conseguido cambiar la historia natural de este cáncer hematológico. Este esfuerzo en investigar y promover la medicina individualizada se ha reconocido en España al otorgar al Instituto Roche el Premio Elsevier-Galien 2008.

P. ¿Qué papel juega Roche España en la investigación clínica oncológica de la compañía?

R. En España, en 2008, el gasto estimado de I+D en Onco-Hematología ha sido de unos 19 millones de euros. De hecho, ocupamos la tercera posición entre los países de la red mundial de la compañía en número de ensayos clínicos, pacientes y centros involucrados en los proyectos de investigación. En España, sólo en Onco-Hematología y en distintas fases, se están estudiando 13 moléculas en un total de 78 ensayos clínicos repartidos a lo largo de 148 centros, incluyendo a más de 5.000 pacientes.

P. ¿En qué posición se encuentran los productos de oncología de Roche en España?

R. En nuestro país, cinco de los diez medicamentos más vendidos de Roche el año pasado pertenecen a la división de Onco-Hematología y son: Herceptin, Mabthera, Avastin, Tarceva y Xeloda. Sin una apuesta tan firme por la investigación, sería imposible que la compañía fuera uno de los agentes que más está contribuyendo a la lucha contra el cáncer en todo el mundo. A nivel mundial, en 2007 oncología supuso el 50 por ciento de las ventas. De cara a 2008 se prevé que esta cifra ronde el 65 por ciento.

P. Además de los tratamientos, ¿el área trabaja en la prevención, en la formación de los profesionales y en la información de los pacientes?

R. La labor de Roche a favor de la prevención y la concienciación está presente en los distintos tumores. Así, en los últimos años, hemos participado activamente en múltiples campañas de divulgación sanitaria junto con asociaciones de pacientes y con sociedades científicas. Todas con el objetivo de informar, concienciar, prevenir y contribuir a eliminar estigmas en torno al cáncer. Recientemente hemos colaborado en la realización de una exposición fotográfica con el objetivo de sensibilizar a la sociedad sobre el cáncer de pulmón.

P. ¿Cómo surgió la idea de organizar el Oncoforum?

R. En Roche siempre hemos estado firmemente comprometidos con la formación y con la divulgación de los avances científicos. Fruto de ello, y a lo largo de los años previos, hemos organizado encuentros formativos monográficos sobre distintos tumores. El Oncoforum es el heredero natural de esas reuniones aunque, en este caso, hemos agrupado la revisión de numerosos tumores en un solo foro científico. Estoy convencida de que hemos conseguido lo que nos proponíamos: acercar a todos los profesionales los avances científicos que contribuyen a mejorar su labor diaria, con el fin último de que los pacientes se beneficien lo más rápidamente posible de dichos avances. La valoración es, sin duda, muy positiva.