Boi Ruiz defendió las medidas tomadas en Cataluña en una jornada en Madrid

Sedisa y Roche reunieron a un grupo de expertos que alertaron de la crisis del SNS

| 2011-07-01T19:31:00+02:00 h |

REDACCIÓN

Madrid

“No hay plan B. No hay alternativa. Es tiempo de reformas profundas y de innovación”. Así de rotundo se mostró Boi Ruiz, consejero de Sanidad de Cataluña, al referirse a las medidas adoptadas en esta comunidad autónoma en materia de contención del gasto farmacéutico. Unas declaraciones que, además, arrojan un punto de vista claro respecto al futuro de la sanidad pública española, eje del debate de una jornada organizada por la Sociedad Española de Directivos de la Salud (Sedisa) y la compañía farmacéutica Roche celebrada la pasada semana en Madrid.

La opinión del consejero catalán fue compartida por el resto de expertos participantes en la jornada. Así, los directivos de Sedisa coincidieron en resaltar la importancia de actuar con medidas contundentes ante la dudosa viabilidad de actual sistema público de salud. Para ellos, el sistema sufre la crisis más profunda a la que ha tenido que hacer frente el Sistema Nacional de Salud (SNS) desde su creación. Una situación que no será superable con pequeños ajustes sino que, consideran, requiere emprender reformas estructurales que renueven y revitalicen el sistema.

Transformar el SNS pasa, en opinión de los directivos de Sedisa, por reducir la factura sanitaria dentro de los centros médicos. Una máxima que, consideran, debe perseguir el gestor de los centros de salud. Para ellos, es necesario dotar de herramientas y protagonismo a esta figura para que implique a los médicos en el control del presupuesto de cada centro. Y es que, son éstos los que tienen en su mano la última decisión al respecto del uso que se haga de los recursos de cada centro. Unos recursos que, si bien subsanan las demandas de los ciudadanos, también son limitados y tienen sus costes.

Desde Sedisa se enumeraron algunas de las vías para conseguir un sistema sanitario más eficiente: la reducción de los ingresos hospitalarios, la potenciación de la atención primaria, a la vez que se introduce una nueva cultura que abogue por mantener la calidad, la creatividad y la incorporación de sistemas de innovación al sistema público de salud.

En aras de conseguir este propósito, desde esta sociedad apostaron por la moderación en el proceso de asistencia sanitaria. Este grupo de expertos cree que algunas buenas ideas a reconsiderar y sobre las que cabe reflexionar son la eliminación de pruebas redundantes, la reducción de visitas sucesivas que en ocasiones creen que son inútiles o una gestión más eficiente de las camas en los hospitales. Unas propuestas que se pusieron sobre la mesa en un debate que fue presentado por Joaquín Estevez, presidente de Sedisa, Francisco Parras, gerente de Relaciones Institucionales de Roche, y Raimon Belenes, vocal de Sedisa.