La rápida adaptación ha rebajado la previsión inicial de pérdidas de 11.000 euros
Los almacenes buscan acuerdos de intercambio para los fármacos ahora inservibles
a.c.
La Coruña
Los efectos derivados de la entrada en vigor en Galicia, el pasado 2 de enero, del catálogo priorizado de medicamentos supondrán, según las últimas estimaciones que manejan los colegios farmacéuticos regionales, una pérdida de unos 3.500 euros de media para cada oficina de farmacia gallega (aproximadamente cinco millones de euros en total). Estas pérdidas serían consecuencia, principalmente, del corto periodo de adaptación a la norma establecido para las farmacias, que expira el 17 de enero, e impedirá, según fuentes colegiales, “una completa salida de los stocks” de aquellos medicamentos (430 presentaciones) que ahora dejarán de financiarse y que podría condenarles a permanecer para siempre en las reboticas.
En este sentido, José Luis Rodríguez Dacal, presidente de la Federación Empresarial de Farmacéuticos Gallegos (Fefga), manifestó que toda nueva pérdida es “un duro golpe para la ya mermada rentabilidad de estos establecimientos”. Sin embargo, como mal menor, la rápida reacción mostrada por los boticarios en modificar sus stocks durante este periodo de adaptación ha conseguido rebajar las primeras previsiones manejadas en diciembre, que preveían una pérdida aproximada de 11.000 euros en cada farmacia (18 millones en el conjunto de las 1.500 farmacias regionales).
“El paso de los días ha permitido una valoración más real de las pérdidas, pero que nadie olvide que si se ha conseguido minimizar el impacto ha sido gracias a las excelentes labores de gestión de los boticarios, no porque la Administración haya facilitado la tarea”, recordó el presidente de la patronal gallega de farmacias.
Precisamente, tanto por sus consecuencias para estos establecimientos como por los efectos para la propia población, Fefga presentará esta semana un recurso contra el reglamento que desarrolla esta financiación selectiva de medicamentos. “Los ciudadanos gallegos quedan discriminados respecto al resto de España”, indicó Rodríguez Dacal como argumento base del recurso.
Devoluciones
En estas primeras semanas de 2011 los farmacéuticos coruñeses han intentado sacar de sus stocks aquellos medicamentos que ahora pueden considerarse como “inservibles”. Para ello, se optó en un primer momento por la devolución directa a los laboratorios a través de los almacenes de distribución de aquellos excedentes con los que aún contaban, al tiempo que procedieron a no realizar nuevos pedidos. Sin embargo, los fabricantes desecharon las devoluciones.
Por ello, según ha sabido EG, la nueva estrategia en la que trabajan las cooperativas que operan en Galicia es la de llegar a acuerdos con otros almacenes nacionales para intercambiar productos. “Determinados fármacos que ahora dejarán de prescribirse en Galicia son de alta prescripción en otras regiones, y viceversa”, apuntó a EG una cooperativa local.
Otro problema con el que han convivido estos días las farmacias gallegas, ya solucionado, ha sido el desabastecimiento puntual de los fármacos que componen el catálogo. “Algunos no eran muy prescritos hasta ahora en Galicia, y eso repercutía en que las boticas no tuviesen grandes existencias”, explicó Rodríguez Dacal.
