La Dirección General de Industria presentará una consulta para modificar la directiva de transparencia
| 2011-03-18T16:50:00+01:00 h |

carlos b. rodríguez

Madrid

Acuciadas por la crisis, las políticas nacionales y medidas de contención de costes en el terreno sanitario a lo largo de toda la Unión Europea son ahora mucho más variadas y complejas que las de hace 20 años. La diversidad existente hace necesario, a juicio de la Comisión Europea, establecer de nuevo un mínimo legal de convergencia mediante la modificación de la directiva de transparencia. Este cambio legal puede ser el instrumento que permita crear un campo de juego estable para las compañías farmacéuticas y asegure el acceso igualitario de los ciudadanos europeos a los medicamentos, dos puntos que las medidas anticrisis han puesto en jaque.

La directiva de transparencia se adoptó en 1989 para evitar, precisamente, que las medidas impulsadas por los estados pusieran barreras al comercio y la libre circulación de bienes y no distorsionaran la competitividad en el mercado farmacéutico. Ninguna de estas dos condiciones se cumplen hoy satisfactoriamente, según la Comisión. Aunque en su momento la directiva fue un gran paso adelante, no cumplió las expectativas de la industria ni de otros agentes.

Varios motivos explican esta situación, según la Efpia. Para empezar, algunos Estados miembro no la traspusieron ni la implementaron de manera efectiva. Además, el comité consultivo de Transparencia, organismo que debía proveer del mecanismo para resolver asuntos relativos a la correcta implementación de la directiva, nunca cumplió su mandato. Y contrariamente a lo señalado por el Tribunal de Luxemburgo, que ha resuelto litigios vinculados a la directiva de transparencia desde 2001, la Comisión Europea ha titubeado a la hora de dar a la norma un mayor alcance o a reforzar sus requerimientos.

Coto a los recortes

El propio tribunal reconoce la necesidad de hacer una reinterpretación extensa y exhaustiva de las provisiones incluidas en la directiva de manera que se asegure que las políticas nacionales no ponen en peligro sus objetivos principales.

La industria innovadora ha identificado rápidamente los beneficios de una modificación de la directiva. Y entre los asuntos que debería incluir (ver tabla) la Efpia hace referencia a las medidas cortoplacistas introducidas en la UE para afrontar el déficit público mediante la reducción del gasto farmacéutico. “Cualquier revisión de la directiva de transparencia debería considerar el impacto a largo plazo de tales medidas en la innovación y la competitividad de la UE y su industria”, señala la patronal.

La Dirección General de Industria y Empresa, encargada de reactivar el debate, comparte esta idea. Muchas nuevas formas de los mecanismos de control de precio y reembolso no están, a su juicio, “claramente recogidas en la directiva”, lo que ha dado lugar a incertidumbres sobre el alcance actual de la legislación y retrasos en la entrada de medicamentos en algunos mercados. El problema, según Antonio Tajani, comisario de Empresa, “afecta tanto a genéricos como innovadores”, aunque la investigación llevada a cabo en el sector farmacéutico ya indicó que el entorno de competitividad para los genéricos está particularmente afectado.

Queda mucho por hacer. La Comisión Europea ha iniciado una ronda de contactos con los Estados miembro, que deben fructificar en el lanzamiento de una consulta pública este mismo año. La idea es desarrollar la nueva directiva y tomar en cuenta esta consulta, las sentencias del Tribunal de Luxemburgo, así como los resultados de la investigación en el sector farmacéutico y otra sobre los impactos de los sistemas nacionales de precios y reembolsos.